Investigadores de la UJED evalúan antivenenos para contrarrestar mordeduras de serpientes

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Gómez Palacio, Dgo. Investigadores de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED) y del Instituto de Biotecnología de la UNAM (IBT UNAM), en colaboración con universidades estadounidenses, están llevando a cabo estudios sobre antivenenos para contrarrestar las mordeduras de serpientes venenosas.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se producen aproximadamente 5 millones de mordeduras de serpientes. En respuesta a esta problemática, la Facultad de Ciencias Biológicas de la UJED, a través de su laboratorio de herpetología, lidera esfuerzos para investigar y desarrollar antivenenos eficaces y seguros. Estos trabajos son dirigidos por el investigador Juan Miguel Borja Jiménez en colaboración con el IBT de la UNAM, la Universidad de Alabama y la Universidad de Clemson en Estados Unidos.

Borja Jiménez explicó que los estudios que llevan a cabo consisten en la evaluación de antivenenos con el objetivo de conocer todas las variantes de su composición, lo que permite mejorar su eficacia. Detalló que existen casos como el de la víbora cascabel cola negra, donde los ejemplares juveniles tienen una composición bioquímica de su veneno distinta a la de los adultos, lo que tiene implicaciones distintas en la sintomatología provocada por las mordeduras, que van desde atrofias musculares hasta hemorragias. Sin embargo, al aplicar un mismo antiveneno para dicha mordedura, este debería contrarrestar ambos venenos. Por eso es importante caracterizar y mejorar los diferentes venenos existentes en el mercado.

Estos estudios buscan mejorar la producción de antivenenos a través de la colaboración interinstitucional, utilizando equipos especializados en los laboratorios de las universidades que participan en la investigación. “Estos enfoques han permitido evaluar y desarrollar antivenenos más efectivos, con una mayor capacidad para neutralizar las toxinas presentes en el veneno de las serpientes, teniendo en cuenta la etapa, especie y región donde se encuentren”, afirmó Borja Jiménez.

Los esfuerzos de investigación se centran en la diversificación de los antivenenos, ya que el veneno de las serpientes varía ampliamente en su composición y toxicidad en diferentes regiones. Actualmente, los investigadores han trabajado en la identificación de las especies de serpientes más prevalentes y peligrosas en cada área, adaptando los antivenenos específicamente a sus venenos particulares.

El investigador destacó que gracias a los antivenenos de tercera generación que se están desarrollando en México, se ha logrado evitar en gran medida la muerte de las personas que sufren mordeduras de serpiente. Por lo tanto, la colaboración entre científicos, instituciones y organizaciones resulta fundamental para abordar esta problemática de manera integral.