“Nuestro Presidente los quiere engañar: que somos corruptos para trabajar, es una mentira, les puedo jurar”, expresaron trabajadores del Poder Judicial durante la manifestación. [Fotografía. Andrea Murcia Monsivais/Cuartoscuro]

Secretarios, jueces, magistrados y trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) tomaron las calles de la Ciudad de México y otra veintena de ciudades para condenar los ataques que han padecido. No eran reclamos de pesos, sino de contrapesos.

En la Ciudad de México, la concentración salió minutos después de las 11 de la mañana desde el Monumento a la Revolución. Al final habrán marchado alrededor de 10 mil personas, aunque los organizadores no dieron una cifra oficial.

En el lugar retumbó un nuevo himno en todas las bocinas. Era un canto que reclamaba: “Soy trabajador del Poder Judicial. No hay privilegios, puro corazón”.

También sonó: “Nuestro Presidente los quiere engañar: que somos corruptos para trabajar, es una mentira, les puedo jurar”.

Había cierta incertidumbre entre los líderes del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación (STPJF), “nos van a cerrar el paso en el Hemiciclo a Juárez, no nos van a dejar llegar al Zócalo”, comentaban.

Trabajadores de la judicatura y ciudadanos reclamaron los ataques en contra del Poder Judicial, entre los que se encuentra la desaparición de 13 de los 14 fideicomisos con los que cuenta la rama de gobierno. Entre los asistentes, también se pudo ver al ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, quien aceptó el reto de salir a protestar.

La manifestación tuvo que parar frente al Hemiciclo, donde, entre reclamos para llegar al Zócalo, el magistrado Héctor Mercado, del Primer Tribunal Colegiado en Materia Laboral, hizo un llamado a “construir un Estado de derecho en nuestro país”.

Los reclamos para llegar hasta el primer cuadro de la capital se empezaron a mezclar con información de la gente: “Está abierto, se puede llegar”.

La insistencia fue tanta que los organizadores cedieron y empezaron a caminar hacia el Zócalo, a pesar de que se desarrolla la Feria del Libro.

Al pasar frente a Palacio Nacional estalló un canto: “¡Yo sí trabajo, no vivo en un Palacio!”. Otros gritaban “¡Fuera AMLO!”, mientras algunos simplemente se seguían.

Replican en todo el país.
La protesta se repitió en varias ciudades del país. En Toluca, alrededor de mil 200 personas, la mayoría trabajadores del Poder Judicial de la Federación, marcharon desde la glorieta El Águila al centro capitalino.

En Villahermosa marcharon más de 600 personas hasta la Plaza de la Revolución.

La marcha en Durango congregó a más de 400 trabajadores que llegaron hasta el centro de la capital.

En Campeche, alrededor de 200 personas marcharon del malecón al parque Novia del Mar.

En Cuernavaca, la representante sindical Azucena Taboada urgió al Senado a evitar la reducción presupuestaria y proteger los empleos de más de mil 100 trabajadores del Poder Judicial en la entidad.

En Hidalgo, más de 700 trabajadores recorrieron las principales calles del centro histórico.

En Oaxaca, cientos marcharon portando vestimenta blanca.

En Mérida, más de mil 500 personas se manifestaron en el Monumento a la Patria.

En Acapulco, 500 trabajadores marcharon por la zona turística del puerto.