Gerard Piqué y Shakira continúan con las espadas en todo lo alto mientras tratan de alcanzar un acuerdo con el que evitar que su mediático divorcio termine en los tribunales. En las últimas semanas sus nombres no han parado de ocupar titulares y son muchas las voces que especulan con una cruenta batalla con sus hijos y con mucho dinero como puntos calientes de la disputa. Pero nada más lejos de la realidad, pues tal y como publica la revista Hola este miércoles, las dos celebridades están intentando llevar el proceso de la mejor manera posible, con mucha “cordialidad” y con una “voluntad negociadora” que les permita llegar a un buen entendimiento: “Ni siquiera hay una fecha límite para ir a juicio porque por ahora hay diálogo”, deslizan desde el entorno de la pareja para el mencionado medio.

En este sentido, y siempre según la información aportada por la revista, el dinero no sería un problema dado el inmenso patrimonio que tienen ambas partes y gracias a que no están vinculados en ninguna sociedad. Por eso la prioridad de ambos y lo que más les preocupa son sus dos hijos: Milan, de 9 años, y Sasha, de 7. Sobre su futuro y sobre todo lo que les rodea ha habido mucha especulación, especialmente por parte de aquellos miembros de la prensa que daban por hecho que Shakira se los iba a llevar rápidamente a Miami. Shakira sí cree que sus dos pequeños podrían tener una mayor tranquilidad en el estado de Florida, sobre todo porque estarían más alejados de las noticias y de los posibles comentarios de otros niños sobre la nueva relación de su padre con Clara Chía que inunda los medios de comunicación. En Miami, cabe recordar, la cantante colombiana cuenta con una mansión en una de las zonas más exclusivas con vecinos como Matt Damon, Alejandro Sanz o Ricky Martin. La adquirió a principios del presente siglo y hace unos años decidió ponerla a la venta, aunque parece que finalmente no logró deshacerse de ella.

El bienestar de los menores es lo más importante en estos momentos y por eso Shakira no impide que Piqué los vea cuando así lo desee. De hecho, hemos podido ver al futbolista del Barcelona llevándoles al colegio en más de una ocasión desde el comienzo del nuevo curso y hace tan solo unos días disfrutó de su compañía en su casa en la Cerdanya. Sin embargo, la encargada de su cuidado y la que convive con ellos es la artista de Barranquilla, que, según la revista Hola, quiere evitar a toda costa cualquier tipo de represalia en un posible juicio y no deja a los menores prácticamente en ningún momento. La prueba es que rodó su último videoclip con Ozuna en Barcelona y que lleva a cabo casi todo el trabajo en el estudio de grabación que tiene en casa.

Los dos temas que agobian a Shakira
Además de su separación de Piqué, la cantante tiene dos asuntos de vital importancia castigando su tranquilidad: Hacienda y la salud de su padre. La Agencia Tributaria lleva años investigando a la artista por ejercicios económicos de hace una década y finalmente tendrá que personarse en los tribunales por defraudar presuntamente la cantidad de 14,5 millones de euros. Los seis delitos fiscales de los que está acusada podrían suponerle ocho años de prisión y una multa de más de 23 millones de euros.

Por otro lado, es necesario mencionar el estado de salud de William Mebarak Chadid. El padre de Shakira fue ingresado de urgencia la semana pasada. “El equipo de comunicación de Shakira confirma que el padre de la cantante se encuentra hospitalizado en la clínica Teknon-Quirón de Barcelona. Los detalles sobre su estado de salud son de carácter reservado, por lo que la familia pide respeto en estos momentos a la espera de ver su evolución”, expresó el equipo de comunicación de la artista de Monotonía.