Miguel Ángel Zavala y Armando Pérez Luna, precandidatos asesinados 2024

No pasaron más de 12 horas entre el asesinato a tiros del morenista Miguel Ángel Zavala Reyes, y el ataque también a balazos del precandidato del PAN, Armando Pérez Luna; dos de las personas que buscaban convertirse en el próximo presidente municipal de Maravatío, un municipio de 80.000 habitantes en el Estado de Michoacán. La Fiscalía estatal ha informado que ha puesto en marcha las investigaciones para esclarecer ambos asesinatos, sin mencionar todavía la actividad política que ambos hombres desarrollaban. La tarde de este martes, al ser cuestionado por la prensa sobre la comunicación de la Fiscalía con respecto al asesinato de los dos precandidatos, el gobernador de Michoacán, el morenista Alfredo Ramírez Bedolla, ha sido claro y escueto: “No nos han informado absolutamente nada”.

Ramírez Bedolla aseguró que cualquier candidato en su Estado que necesite que le brinden seguridad, se puede acercar a su equipo para ayudarle. Aunque dejó claro que no tiene información para esclarecer nada sobre los asesinatos de su compañero de partido, Zavala Reyes, y el representante de la oposición, Pérez Luna, sí advirtió sobre los peligros a los que se enfrentan aquellos que aspiran a ser candidatos con el apoyo de grupos delictivos: “A los que aspiran a cargos de elección popular, [les digo] que no busquen, porque es vox populi, que para ganar una elección —cosa que es falsa— pedirle permiso a algún maloso. No, porque terminan secuestrados y extorsionados, entonces, que no busquen la salida errónea. También es cierto que hay grupos que pretenden influir en la decisión de candidatos o pretenden hacerse del poder de algún municipio”, dijo.

La tarde de este lunes, el médico Miguel Ángel Zavala Reyes fue interceptado por dos hombres que le dispararon mientras él estaba en su coche, cuando salía de la clínica en donde trabajaba, ubicada en el fraccionamiento Rancho La Huerta, a un kilómetro del centro de la ciudad. Zavala Reyes era originario de Morelia, la capital del Estado, y había anunciado en noviembre pasado su intención por contender por el oficialista Movimiento de Regeneración Nacional, Morena, por la presidencia del municipio. El partido del presidente López Obrador ha lamentado el hecho y ha exigido a la Fiscalía una investigación exhaustiva: “Este acto cobarde y deplorable representa una pérdida irreparable para nuestro movimiento”.

Apenas el 19 de octubre pasado, hombres armados secuestraron y asesinaron a balazos a Dagoberto García Reyes, un líder de Morena que también aspiraba a la presidencia municipal de Maravatío, localidad ubicada a 100 kilómetros de Morelia.

Aproximadamente unas cinco horas después del ataque a Zavala Reyes, durante la noche de este lunes dos hombres en una motocicleta le dispararon a Armando Pérez Luna, en la calle Jesús Romero Flores, en la unidad habitacional Infonavit, según ha dado a conocer la Fiscalía. Pérez Luna, un líder transportista de la región y padre de la regidora local Andrea Pérez Solís, ya contaba con experiencia política —fue regidor entre 2015 y 2018— y en enero pasado registró su candidatura para la presidencia municipal de Maravatío, ante la Comisión Estatal de su partido. María del Refugio Cabrera Hermosillo, presidenta del Comité Directivo Estatal del PAN, en Michoacán, exigió a las autoridades realizar investigaciones profesionales para esclarecer los hechos: “¡Ya basta de asesinatos en Michoacán y el país! Exigimos a los gobiernos de López Obrador y de Alfredo Ramírez Bedolla —gobernador de Michoacán— cambiar su errónea estrategia de abrazos y no balazos”, dijo.

Cuando solo faltan un par de días para que comience oficialmente la campaña en México —de cara al proceso electoral más grande en la historia del país, el próximo 2 de junio—, ya suman 21, los homicidios relacionados con la violencia política-electoral, una cifra que añade no solo a políticos, sino a funcionarios públicos e incluso familiares relacionados con los políticos, según el informe Votar entre balas, de la organización Data Cívica: “En México, la violencia electoral se ha convertido en una herramienta del crimen organizado para influenciar la vida pública de estados y municipios”.

En esta región del Estado de Michoacán, operan los carteles Jalisco Nueva Generación (CJNG), La Familia Michoacana y Los Caballeros Templarios, grupos que se disputan el control de diversas actividades ilícitas en el oriente del Estado. Durante enero, al menos cinco candidatos o aspirantes a un cargo de elección popular murieron asesinados en México.