Un hombre camina bajo la lluvia en una calle de Santiago. ESTEBAN FELIX (AP)

Chile dio la bienvenida oficial al invierno este miércoles 21 de junio, jornada en la que comenzaron a caer las primeras gotas de una lluvia esperada con ansias por los habitantes de Santiago de Chile, que desde hace años sufren los efectos de una compleja crisis hídrica. El sistema frontal —que crecería en intensidad cerca del fin de semana— recargará de agua las fuentes y embalses abastecedores, pero también complicará la vida cotidiana de la zona central del país sudamericano.

Tras una intensa ola polar de frío, que antecedieron a días más cálidos y con bajas temperaturas matinales y nocturnas, la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) emitió una alerta por precipitaciones fuertes y moderadas en las regiones Metropolitana de Santiago, O’Higgins, Maule, Ñuble y Biobío, hacia el sur de la capital. El fenómeno se extendería al menos hasta el viernes 23 de junio.

Un aspecto preocupante de este temporal es la llamada isoterma cero, medida que indica la altitud en que el agua caída se transforma en nieve. De acuerdo a las estimaciones, las precipitaciones líquidas caerían en zonas altas de la cordillera, lo que generaría riesgos de aluviones. En las últimas décadas, la capital chilena ha sufrido varios episodios de este tipo, los que incluso han costado vidas de habitantes de los sectores altos. Esto también provoca alteraciones en el funcionamiento de los servicios básicos, entre ellos el agua potable, debido a que las remociones de tierra enturbian los cauces de los ríos Mapocho y Maipo, los principales abastecedores de la cuenca.

Cuánto lloverá en la zona central de Chile
Según la alerta meteorológica, se espera que durante los próximos tres días caigan 200 milímetros de agua en la Región Metropolitana, específicamente en la zona cordillerana. La situación sería similar en las vecinas regiones de Valparaíso y O’Higgins, además de Maule, Ñuble y Biobío.

En los valles —en donde se encuentran los asentamientos urbanos más grandes— la lluvia sería moderada. Se estima que en el centro de Santiago podrían caer de 8 a 10 milímetros en la jornada del jueves.

Hasta cuándo se extenderán las precipitaciones
El análisis de los meteorólogos, en conjunto con las autoridades, señala que la lluvia llegará con más fuerza a partir del jueves 22 de junio, para extenderse hacia la noche del viernes 23. El sábado 24, en tanto, podrían registrarse precipitaciones matinales en las partes altas de las regiones.

Alerta por el abastecimiento de agua
Las precipitaciones arribarán a la zona central chilena con temperaturas que variarán entre los 13° y 15° en los valles. En la cordillera, el 0° que transforma el agua en nieve se registrará a los 3.000 metros. La altitud de la isoterma cero alertó a Aguas Andinas, la empresa encargada de abastecer de agua potable a gran parte de Santiago de Chile. La compañía, que se abastece de los torrentes que nacen desde las montañas de Los Andes, activó un plan preventivo ante la posibilidad de que el líquido se enturbie debido a las remociones de tierras y pequeños aluviones. Entre sus medidas de contención, la firma activará su infraestructura de respaldo, que asegura el suministro para sus clientes por al menos 37 horas.

Inundaciones y cortes de servicio eléctrico
La lluvia caída en las primeras horas del jueves provocó inundaciones en las principales avenidas de Santiago de Chile. En la comuna de Maipú, al poniente de la ciudad, el canal de Santa Marta se desbordó debido a la gran cantidad de basura acumulada, que impidió el flujo normal del agua acumulada.

Las horas iniciales del sistema frontal provocaron además cortes en el suministro eléctrico. Desde el Gobierno informaron que cerca de 37 mil personas no tenían luz en sus hogares. Las empresas Enel y Compañía General de Electricidad, que están a cargo de la distribución energética local, señalaron que estaban trabajando con todos sus equipos para reponer el servicio a la brevedad.

Cierre del paso fronterizo con Argentina
Una de las primeras señales que dieron cuenta de la fortaleza del temporal que se avecina ocurrió en el paso fronterizo Los Libertadores, que marca el límite de Chile con Argentina. El complejo —que está ubicado en la Región de Valparaíso y que es usado como ruta terrestre para unir Santiago con Mendoza— cerró sus operaciones a partir del miércoles, en una medida que se extenderá hasta que las condiciones climáticas lo permitan.