Morena Mario Delgado. líder nacional de Morena (Especial)

Al deslindarse de posibles pactos de impunidad con el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, el presidente de Morena, Mario Delgado, aseguró que su partido “no hace acuerdos en lo oscurito ni tiene complicidades con nadie”.

“Seguramente Alito Moreno no quiere perder las gubernaturas y estoy seguro que tampoco quiere ir a la cárcel. Imagínate, qué desperdicio, teniendo tantas casas y lo van a encerrar. Pero eso ya es un asunto de la justicia”, bromeó.

“Yo respeto los matrimonios ajenos, pero está claro que en Va por México iban por el camino equivocado y el PRI va rumbo a la desaparición; es un buen viraje del PRI, pero creo que es ya demasiado tarde, porque de todas maneras les vamos a ganar las únicas dos gubernaturas que le quedan, Coahuila y el Estado de México”, sostuvo.

En conferencia junto con los nuevos dirigentes estatales de Morena, Delgado admitió que la iniciativa priista de prolongar por cuatro años más la permanencia del Ejército en tareas de seguridad pública “tiene mucho sentido, es muy interesante y debe apoyarse, aunque esa será una decisión de los legisladores”.

Consideró que el quiebre del “matrimonio” de la coalición opositora “era de esperarse”, ya que “no tienen ningún proyecto, sólo frenar a Morena, y lo único que los une es la nostalgia de la corrupción, la añoranza del sistema que ellos establecieron, de complicidades, donde unos cuantos podían decidir sobre todo un pueblo, pero esa época ya pasó”.

Por eso hoy, “cuando hay motín, se están peleando el botín”, afirmó. “Ojalá sea un viraje hacia la sensatez y hacia la responsabilidad con nuestro país por parte del PRI y que ahí se quede la derecha con su coraje”.

Insistió en que los del PRI “hicieron su apuesta de aliarse con lo peor de la derecha y pues ahí están los resultados”. Hoy –apuntó– vemos bien la iniciativa del PRI de “extender el plazo a la Guardia Nacional, porque tiene todo el sentido del mundo”.

“Porque, en lugar de militarizar, al contrario, se fortalece la posibilidad de que la Guardia Nacional siga creciendo, hasta que llegue un momento en que ya no sea necesario el auxilio del Ejército en labores de seguridad. Mientras más crezca la Guardia, mientras más se fortalezca, en lugar de ir a la militarización, por el contrario, vamos a tener una institución civil que nuestro país requiere”, indicó.