Diana Mondino, ministra de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto (MRECIC) de la República Argentina, durante la rueda de prensa con motivo de su visita a la OCDE en París, Francia. (EFE)

La OCDE considera que el Gobierno del presidente Javier Milei está tomando las medidas fiscales y monetarias adecuadas para poder controlar la hiperinflación en Argentina, que tiene que ser “la prioridad para ayudar a la gente”, aunque el efecto en un primer momento va a ser “doloroso”.

Esta es la posición manifestada por la economista jefe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Clare Lombardelli, al ser preguntada este jueves por EFE sobre las perspectivas económicas de Argentina, que han sido revisadas netamente a la baja para este año.

Durante la presentación en París del informe semestral de Perspectivas, Lombardelli indicó que el Ejecutivo de Milei está tomando medidas fiscales y monetarias “muy restrictivas” para tratar de controlar la inflación.

“Es lo que hay que hacer. Es verdad que eso tarda tiempo en tener efecto y entre tanto puede ser desafiante”, indicó antes de añadir que en sus previsiones auguran una ralentización en la escalada de los precios que sufre el país sudamericano.

En el capítulo dedicado a Argentina, la OCDE señala que la inflación interanual ha alcanzado el 288 por ciento en marzo, “pero las variaciones mensuales de los precios han comenzado a moderarse”, y de hecho observa que “la inflación se está desacelerando visiblemente” y prevé que “con el tiempo disminuirá de forma más pronunciada”.

La OCDE cree que la economía argentina, que ya sufrió una caída del producto interior bruto (PIB) del 1.6 por ciento en 2023, se hundirá un 3.3 por ciento adicional en 2024.

Es una caída más profunda que la que había calculado la propia OCDE en febrero y en noviembre. Para 2025, anticipa una recuperación únicamente parcial del 2.7 por ciento. La economista jefe admitió que este será un periodo “doloroso”.

Argentina formaliza su ingreso a la OCDE

La jefa de la diplomacia argentina, Diana Mondino, participa desde este jueves y hasta el viernes en la reunión ministerial de la OCDE en su sede en París, durante la que se presentará la hoja de ruta que se le ha fijado para el proceso de adhesión a la organización.

“El proceso se aceleró muy significativamente en los últimos cuatro meses, en los que hemos hecho un esfuerzo bastante importante para lograr llegar a esta fecha”, señaló Mondino en una breve comparecencia ante la prensa en la sede de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.

Con la llegada de Milei al poder se ha reactivado ese proceso que estaba prácticamente en suspenso por la falta de progresos por parte del anterior gobierno.

Argentina es uno de los seis países a los que la OCDE invitó a comienzos de 2022 para que prepararan su adhesión, junto a Brasil, Perú, Rumanía, Bulgaria y Croacia. A ellos se ha añadido Indonesia.

La organización no fija ni da ningún plazo para realizar el proceso, que depende de los avances de cada país para acerarse a sus estándares. En el caso de Argentina, el proceso estuvo parado durante el anterior mandato presidencial.