El Ejército mexicano resguarda un laboratorio de droga sintética en Culiacán, Sinaloa, en junio de 2019.JUAN CARLOS CRUZ / CUARTOSCURO

La Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) ha desmantelado una red de narcotráfico vinculada al cartel de Sinaloa que operaba en siete células ubicadas en la costa este para transportar toneladas de metanfetamina, heroína, fentanilo y otras drogas por todo el país. Las autoridades federales han anunciado este miércoles que la llamada Operación Angels Envy, iniciada en 2017, ha acabado con más de una treintena de detenidos y el decomiso de un centenar de kilos de drogas y armas de fuego, y millones de dólares en efectivo.

La investigación, que abarcó siete Estados, descubrió y desmanteló una red narcotraficante que enviaba drogas por California a siete células que operaban en la ciudad de Washington, Maryland y Virginia, las que trabajaban para “una peligrosa organización transnacional de narcotráfico” relacionada al cartel que solía liderar Joaquín “El Chapo” Guzmán, según un comunicado difundido por la DEA. Estas organizaciones transferirían sus ganancias y traficaban armas de fuego a la poderosa organización criminal mexicana.

La DEA informó que 33 “individuos de alto nivel” han sido acusados y que decomisaron 32 rifles, 81 pistolas, 5,4 millones de dólares en efectivo, 215 kilogramos de metanfetaminas, 129 de cocaína y 42 de fentanilo, entre otras drogas. La cantidad del opiáceo sintético -hasta 100 veces más potente y adictivo que la morfina- era suficiente como matar a más de 21 millones de personas por sobredosis, más que la población combinada de Washington, Maryland, Virginia, según las estimaciones de la Agencia Antidrogas de EE UU.

La Operación Angels Envy “sin duda salvó un número incontable de vidas de miembros de nuestras comunidades”, sostuvo este miércoles en una conferencia de prensa en la Oficina del Fiscal de Estados Unidos en Alexandria, Raj Parekh, fiscal interino federal para el Distrito Este de Virginia. Entre septiembre de 2019 y septiembre de 2020 al menos 87.000 personas murieron por una sobredosis de drogas en EE UU, un aumento del 27% con respecto a los 12 meses anteriores, rompiendo el récord en un solo año.

“Al igual que estas drogas tienen un impacto de gran alcance en nuestro país, me enorgullece decir que el trabajo de nuestros detectives (…) tuvo un impacto aún mayor en las operaciones del Cartel de Sinaloa”, sostuvo el alguacil del condado de Loudoun (Virginia), Mike Chapman. Solo en ese condado incautaron 50 kilogramos de cocaína y 1,4 millones de dólares en efectivo, la mayor confiscación de este tipo en la historia del territorio. Las investigaciones lograron identificar y desmantelar otras organizaciones de tráfico de drogas en California, Missouri, Ohio, Nueva Inglaterra y Nueva York.