El funeral del líder de la oposición rusa Alexei Navalny se llevará a cabo en una iglesia en el sur de Moscú el 1 de marzo de 2024, dijeron aliados del político. Foto Afp

Londres. El funeral y entierro del líder opositor ruso Alexeksei Navalny tendrá lugar el viernes en Moscú, anunció su portavoz, pero sus aliados acusaron al Kremlin de frustrar sus intentos de organizar un evento más grande el día anterior.

Kira Yarmysh, su portavoz, publicó en la red social X que el funeral de Navalni se celebraría el viernes a las 14:00 hora local de Moscú en la Iglesia del Icono de la Madre de Dios, en el distrito moscovita de Maryino, donde vivía el líder opositor.

Luego, Navalny será enterrado en el cementerio de Borisovskoye, al otro lado del río Moscova.

Los servicios, presididos por un sacerdote y acompañados de cantos corales, suelen permitir que la gente pase junto al féretro abierto del difunto para despedirse. La iglesia ortodoxa rusa elegida es un imponente edificio blanco de cinco cúpulas que está en un barrio residencial del sureste de Moscú.

No estaba claro cómo las autoridades iban a garantizar el control de la multitud.

Sin embargo, a juzgar por anteriores concentraciones de partidarios de Navalny -a quienes las autoridades han calificado de extremistas apoyados por Estados Unidos-, es probable que haya una fuerte presencia policial y que las autoridades disuelvan todo lo que consideren una manifestación política en virtud de las leyes de protesta.

“El funeral será pasado mañana y aún no estoy segura de si será pacífico o si la policía detendrá a quienes han venido a despedirse de mi marido”, dijo Yulia, la esposa de Navalny, en un discurso ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo, donde recibió múltiples ovaciones.

Navalny, de 47 años, murió en una colonia penal del Ártico el 16 de febrero. Sus aliados han acusado al presidente Vladimir Putin de haberle mandado a asesinar porque el dirigente ruso supuestamente no podía tolerar la idea de que Navalny fuera liberado en un posible canje de prisioneros.

El Kremlin ha negado la implicación del Estado en su muerte y ha dicho que no tiene conocimiento de ningún acuerdo para liberar a Navalny antes de su muerte.

El certificado de defunción de Navalny dice que murió por causas naturales, según sus partidarios.