En 2024, México celebrará elecciones presidenciales y como resultado de ello, el rumbo del país podría dar un giro inesperado al confirmar la continuidad o retirada de Morena del poder.
Pero, más allá de hacer pronósticos electorales basados en las ‘corcholatas’ destapadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador, hay cierto ‘presagio’ sobre cómo podría reaccionar el mandatario si su partido pierde los comicios.
“Claramente si la elección la pierde el partido en el gobierno, y es por un margen estrecho, y uno toma como referencia lo que ocurrió en 2006, pues obviamente eso podría ocurrir. Para el gobierno y para el movimiento obradorista, esto se trata de de una misión histórica, no importa lo que ocurra en el mundo material, esto es una misión divina, y cualquier cosa que la obstruya, incluido los votos, se trata de un fraude a la historia del país (…) el triunfo de la derecha es moralmente imposible”, señaló Luis Carlos Ugalde, Fundador y director general de Integralia Consultores, en EF Meet Point. Gobernabilidad, seguridad y democracia ¿cómo viene el año?
“Es inaceptable moralmente para el gobierno que eso pudiera ocurrir, es indigerible, está el elemento completo para una situación, muy improbable, porque los datos apuntan que podría volver a ganar Morena, pero si esto no llega a ocurrir, la tentación de que desconociera el resultado por supuesto, existe”, añadió el especialista.
Las posibilidades de que el presidente López Obrador actúe de este manera, invitarían a comparar su reacción con la del expresidente de EU, Donald Trump, quien se negó a aceptar su derrota electoral en los comicios de noviembre del 2020 que le dieron ventaja a Joe Biden.
“Si se diera una tentación de Morena, dentro de Palacio Nacional, por tratar de desconocer eso, sería un quiebre institucional muy dramático, muy de consecuencias insospechadas. Si se da el escenario donde la sociedad enfile al cambio en 2024, tendrán que verse arrinconados y reconocer que esa fue la voluntad popular. De otra manera, en lugar en la historia del presidente López Obrador, quedará indeleblemente manchado”, señaló Salvador Camarena, Columnista de El Financiero.
