La senadora Elizabeth Warren anunció este martes que no apoyará a Jerome Powell para un segundo mandato como presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos.

“Su historial me preocupa seriamente”, dijo durante una audiencia del Comité Bancario del Senado. “Usted ha actuado para hacer que nuestro sistema bancario sea menos seguro, y eso lo convierte en un hombre peligroso para encabezar la Fed y es por eso que me opondré a su nombramiento”.

El mandato de Powell expira en febrero y Bloomberg News ha informado que los asesores de la Casa Blanca están considerando recomendar al presidente Joe Biden que lo mantenga en el cargo.

Los votos del jefe del banco central que se unieron a las políticas del vicepresidente de supervisión Randal Quarles de aligerar la regulación en nombre de la eficiencia han sido un punto de fricción tanto para Warren como para Brown.

Yellen, que testificó junto a Powell en la audiencia del Senado sobre la economía durante la pandemia, declaró a asesores de alto nivel de la Casa Blanca en agosto que apoya la reelección de Powell como presidente. Su apoyo es una voz clave en el proceso de deliberación de la Casa Blanca, informó Bloomberg, dada su experiencia previa como presidenta de la Fed y en el Banco Central.

Lael Brainard es visto como otro competidor líder para el asiento de la silla. Ella y Powell han divergido en sus puntos de vista sobre la regulación financiera.

La oposición de Warren complica los cálculos de la administración Biden. Tendrá que aumentar su presión para el apoyo a Powell o elegir otro candidato que puede enfrentar más resistencia de los republicanos en el proceso de confirmación en un Senado en el que los demócratas tienen 50 de los 100 escaños.

Un funcionario de la Casa Blanca no ofreció un comentario inmediato.

Powell, un republicano nominado a la Junta de la Fed por el expresidente Barack Obama y elevado a la presidencia del Banco Central por el expresidente Donald Trump, ha recibido el apoyo verbal de varios senadores republicanos.

La declaración de Warren contra Powell indica que ella no cree que un nuevo vicepresidente de supervisión pueda establecer la agenda con un presidente que tal vez no esté de acuerdo con él o ella. Powell ha mostrado flexibilidad en el pasado, al menos resistiéndose a disentir en los votos de la Junta contra las iniciativas de Daniel Tarullo, quien dirigió una revisión agresiva de la supervisión a raíz de la crisis financiera de 2008-2009.

Powell interpreta la Ley Dodd-Frank, las reformas de 2010 implementadas para fortalecer a los bancos después de la crisis, en términos legales bastante estrictos. La ley dice que el vicepresidente de supervisión “desarrollará recomendaciones de políticas” para la Junta de la Fed y “supervisará la supervisión y regulación de dichas empresas”.