Washington. El presidente de Irán Ibrahim Raisi tenía “las manos machadas de sangre”, declaró este lunes un portavoz de la Casa Blanca, al margen de que el gobierno estadunidense ofreció sus condolencias por su muerte en un accidente de helicóptero.
“Era un hombre con las manos manchadas de sangre”, aseveró John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad, al decir que Raisi era responsable de abusos “atroces” a los derechos humanos en Irán y que apoyó a grupos en la región como Hamas. Sin embargo, señaló que “como en cualquier otra situación, lamentamos la muerte y ofrecimos condolencias oficiales como corresponde”.