Moscú ha lanzado en las últimas horas una de las mayores oleadas de misiles y drones sobre Ucrania en la víspera de la conmemoración de la victoria del ejército rojo sobre los nazis —el Día de la Victoria—. Según Ucrania, sus defensas han derribado los 35 drones iraníes lanzados por Rusia. En Kiev, hay al menos cinco heridos y ha habido destrozos en automóviles, edificios e infraestructuras, según su alcalde. En Odesa (sur), un vigilante de seguridad de un almacén de alimentación ha muerto y tres personas han resultado heridas en el bombardeo. En Jersón hay ocho heridos, entre ellos un niño de nueve años. Según el ejército ucranio, Moscú ha disparado 16 misiles contra las provincias de Járkov, Jersón, Mikolaiv y Odesa en las últimas 24 horas, además de otros 61 ataques y 52 descargas de artillería pesada contra posiciones ucranias y zonas con civiles. Mientras, el líder de la compañía de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin, ha afirmado que sus hombres continúan avanzando en Bajmut (este). Este supuesto avance en sus posiciones se produce mientras los paramilitares siguen a la espera de la munición prometida por el Ministerio de Defensa de Rusia.
Moscú lanza uno de los mayores ataques con misiles y drones sobre Ucrania en la víspera del Día de la Victoria
Un vigilante de seguridad ha muerto por el bombardeo en Odesa. Hay al menos 16 heridos en Jersón, Kiev y la propia Odesa | Prigozhin dice que sus mercenarios avanzan en Bajmut mientras esperan la munición prometida por el Kremlin