Como parte del proceso de compra-venta, los sindicatos de trabajadores de Mexicana de Aviación se presentaron ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje para notificar su intención de retirar los embargos que pesan sobre las marcas de la aerolínea, así como de los inmuebles que aún tiene.
Pero, los medios de protección a las propiedades sólo se retirarán cuando el gobierno demuestre que ya cuenta con los recursos necesarios, unos 817 millones de pesos, para finalizar la compra de la marca Mexicana y una serie de inmuebles, indicó Eduardo Barrera, presidente de la delegación de pilotos de Mexicana en la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA).
“Informamos que estamos de acuerdo en retirar los embargos, en el momento nos van a llamar que ya está el dinero, que eso lo está consiguiendo Comunicaciones y Transportes, y ahora sí se hace efectivo el levantamiento de los embargos y se firma el contrato de compra-venta”, detalló Barrera en entrevista para EL FINANCIERO.
El paso siguiente, agregó el representante sindical, consiste en una reunión con la Secretaría del Trabajo para que los diferentes grupos de trabajadores puedan acordar en qué proporción se dará la dispersión de recursos, es decir, cuánto le corresponderá a cada trabajador de la línea aérea.
Como EL FINANCIERO informó, el gobierno acordó la compra de la marca Mexicana y un grupo de activos por 816 millones 786 mil 335 pesos, un monto que sólo alcanzará el 10 por ciento del valor adeudado a los poco más de 8 mil colaboradores que la línea aérea tenía hace una docena de años, cuando suspendió sus operaciones tras malos manejos de su entonces dueño, Gastón Azcárraga.
Se prevé que los recursos, aportados por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) estén disponibles antes de que finalice el primer mes del año.
