Lucerito Mijares, hija de Manuel Mijares y Lucero, ha conseguido ganar popularidad entre el público gracias a su voz y carisma, incluso por aparecer en el escenario junto a sus padres, quienes realizan su gira Hasta que se nos hizo.
La buena relación entre los cantantes –que hasta son vecinos– se refleja en bromas y algunos reclamos. La pareja anunció en 2011 su separación luego de 14 años juntos, pero siempre se mantuvieron en buenos términos con una relación amistosa y de mutuo respeto.
Estos valores son los que buscan imponerle a su hija, por lo que la han inscrito a una prestigiosa institución en Estados Unidos ubicada en Wellesley, Massachusetts, cerca de Boston, en donde la joven de 17 años cursa la preparatoria (del grado 5 al 12).
¿Cuánto cuesta la escuela de Lucerito Mijares?
Dana Hall School fue fundada en 1881 y basa su entorno educativo a un aprendizaje que lo conjunta con la risa, la empatía y el enfoque con un compromiso social. Exclusivamente para mujeres, está integrado por niñas y adolescentes entre 10 y 18 años.
Entre sus principales características se encuentra su modalidad de internado, talleres, cursos y programas tanto de música como de deportes para apostar por la excelencia académica, artística y atlética. La colegiatura ronda los 54 a 67 mil dólares, que en pesos mexicanos supera al millón 100 mil pesos hasta poco más de un millón 300 mil.
Por medio de más de 220 metros cuadrados busca desarrollar el talento de sus estudiantes sin dejar de lado el esparcimiento, por lo que entre sus instalaciones suman una pista de hielo y un lago. Además de actividades como el teatro, la danza o las artes visuales hay oportunidad de practicar esgrima, tenis, natación, voleibol, hockey sobre hielo, basquetbol y otros deportes.
“Aprenderá a defender lo que cree y a estar en desacuerdo con la gracia. Luchará con temas que lo dejan perplejo temporalmente y descubrirá cómo avanzar hacia lo próximo. Florecerá en un entorno en el que descubrirá y expresará exactamente quién es usted”, se afirma en su página web.
