DURANGO, DGO.- La diputada Sandra Amaya Rosales presentó la iniciativa de reformas a la Ley Orgánica del Municipio Libre, para garantizar que en los puestos titulares de administración pública estén integrados por 50 por ciento de mujeres y 50 por ciento hombres.
Compañeras y compañeros, los invito a ser parte de esta reforma, de este horizonte de fortalecimiento de nuestra democracia, bajo el principio de paridad de género, y que nos quede claro algo: no se puede entender la vida política sin la igualdad.
Estoy segura que garantizar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres es un compromiso de todas y todos que conformamos esta Legislatura, y ese compromiso nos obliga a promover el empoderamiento de las mujeres y a luchar contra todo tipo de discriminación, que lamentablemente hoy siguen padeciendo, al intentar acceder al poder público o durante el ejercicio de éste.
Como iniciadora de la reforma a la Constitución local en la pasada legislatura y como mujer que de nuevo tiene la oportunidad de ser la voz de muchas duranguenses, estoy convencida de la importancia y la trascendencia que el contenido de la reforma constitucional, en materia de paridad de género, representa para la vida política y social del país.
Estoy segura que las reformas que hagamos en Durango serán el parteaguas para establecer mecanismos que permitan facilitar el acceso a mejores condiciones de vida y a mayores oportunidades de crecimiento y desarrollo de todas y cada una de las niñas, jóvenes y mujeres de nuestra Entidad.
Garantizar la integración de la mujer a cargos públicos de elección popular y a puestos encargados de la configuración de la agenda pública es necesario para el establecimiento de una nueva forma de organización de la sociedad, en la que se suprima toda exclusión hacia las mujeres y se genere un real equilibrio entre géneros, en el que ambos asuman responsabilidades en todas las esferas de la vida pública y la vida privada.
Si aspiramos a que Durango sea de verdad inclusivo, la paridad debe ser un eje rector en ese proceso de evolución, la paridad debe ser una meta, como reconocimiento expreso del hecho de que la humanidad está integrada por una representación 50-50 de mujeres y hombres.
Antes de concluir mi participación, le quiero pedir a la Presidencia de la Mesa Directiva que, en términos del artículo 182 de la Constitución Local, se realice en forma inmediata la declaratoria de reforma en materia de paridad de género en nuestra Constitución, me refiero al decreto 585, mismo que fue aprobado en la pasada Legislatura y fue enviada a los ayuntamientos.
Ninguna reforma a la Constitución local es más que otra y por ello, todas merecen el mismo tratamiento, por lo que solicito que se haga la declaratoria de reforma constitucional en materia de paridad de género en Durango.
