La tregua que en automático se generó para la actual Jefa Estatal del PAN, Verónica Pérez Herrera, está a unas horas de concluir, quienes dejaron pasar la lucha electoral para ajustarle cuentas a la dirigente panista, ya empiezan a mover los hilos para que Pérez Herrera abandone dignamente, si es que puede, la “dirección” del partido.
Y es que 50 días no fueron suficientes para que los panistas olvidaran como se sirvió en charola de plata la diputación plurinominal y la forma como fueron designadas las candidaturas a las diputaciones locales y federales.
Por el momento solo se espera que concluya el cómputo en cada uno de los distritos y se haga entrega de las constancias de mayoría, para iniciar el proceso de defenestración, porque desde luego tampoco están de acuerdo en que sea ella quien lleve a cabo el proceso de elección del coordinador de la bancada de azul y blanco en la Legislatura LXIX, y las decisiones políticas que trae aparejado el resultado electoral en relación a la alianza signada con el PRI y el PRD.
Hasta donde se sabe, ya hay nombres en la mesa: Bonifacio Herrera Rivera, del grupo de Los Gallos; Rodolfo Dorador por el grupo que él encabeza; Patricia Flores Elizondo, del grupo del Negro Elizondo; y la actual diputada panista María Elena González Rivera, miembro activo del grupo que comanda el ex diputado local Pedro Toquero Gutiérrez, en los municipios de la zona norte del estado.
Aparentemente el único grupo que no aparece es de la Laguna encabezado por el extinto Juan de Dios Castro Lozano, los desencuentro los tienen muy entretenidos, por ello el resultado en la Comarca Lagunera.
Luego del escenario 2021 en que el PAN se coloca como tercera fuerza electoral en el estado, cobra mayor importancia la elección de un nuevo dirigente, que venga a realizar tareas de recuperación y no a administrar la ruina del partido frente a la elección 2022.
En la arena electoral de los albiazules, dicen los que saben que ningún grupo al interior tiene el suficiente peso para competir en solitario y que requerirán de alianzas para llegar a la jefatura estatal del PAN.
Sin embargo, desde que José Rosas Aispuro Torres, se alzó con la vitoria en la gubernatura del estado, bajo la marca del Partido Acción Nacional, es éste quien encabeza sin nombre el grupo que lleva mano en las decisiones, fortalecido con activos de todas las corrientes que existen al interior.
LOS GRUPOS…
Otrora, el grupo de “Los Gallos” al que pertenece Bonifacio Herrera, sostuvo en su poder la dirigencia estatal por casi 20 años, misma que sucumbió a manos de quienes entonces aún se reconocían como el grupo de “Los Elizondos”, que llevó a la dirigencia estatal a Víctor Hugo Castañeda Soto, y que a partir de allí se denominaron “Doradoristas”, encabezados por Rodolfo Dorador, y mantuvieron el control, con la jefatura de Lorenzo Martínez Delgadillo, justo, este grupo es el que pretende rubricar la candidatura de Rodolfo Dorador.
“Los Elizondos” quienes tomaron el mote de Rodolfo “El Negro” Elizondo, que remonta su poderío al período de los 80s, y que ahora estarían postulando a Paty Elizondo, sobrina de “El Negro”, personaje que no se le conoce vida partidaria en el estado, ni experiencia en la dirección política de partido.
La diputada María Elena González Rivera, aunque asentada en la capital del estado, es respaldada, por el ex diputado local Pedro Toquero Gutiérrez, quien tiene liderazgo natural en el corredor integrado desde el municipio de San Juan del Río hasta Hidalgo, justo su posición en el Congreso del Estado, se la debe a una propuesta de este personaje para ser candidata por la vía plurinominal.
Bonifacio Herrera Rivera, Rodolfo Dorador, Patricia Flores Elizondo y María Elena González Rivera, es lo que hay por el momento en el PAN.
¿Cuál de ellos será capaz de recuperar el PAN para los panistas, o quién llegará solo para administrar su ruina en el 2022?
