TOKIO.- El COI y los organizadores de los Juegos Olímpicos tienen un manual con el que pretenden sacar adelante por fin la aplazada festividad deportiva.
La próxima semana, ambas partes mostrarán su estrategia para explicar cómo será posible que 15.400 deportistas olímpicos y paralímpicos, así como decenas de miles de visitantes entren en Japón y realicen sus actividades de forma segura en menos de seis meses, cuando deben inaugurarse los Juegos.
Los organizadores y el Comité Olímpico Internacional finalmente revelarán sus planes, con la esperanza de restar fuerza a las versiones de que los Juegos se cancelarán, en momentos en que Tokio y buena parte de Japón se encuentran en estado de emergencia ante el aumento de los casos de COVID-19.
La presentación se realizaría el 4 de febrero en las oficinas generales del COI en Suiza y un día después en la capital japonesa.
Hemos creado cuatro escenarios diferentes, desde uno que tiene restricciones de viajes y grupos separados hasta uno donde la pandemia prácticamente se había ido”, explicó el martes Lucia Montanarella, directora de operaciones de prensa del COI, durante una discusión de un panel encabezado por la Asociación de Prensa Deportiva Internacional.
El escenario presente es muy parecido a uno de los que hemos creado, con la pandemia todavía entre nosotros, con algunos países que han podido contener esto pero otros que no lo han conseguido”.
El manual buscará crear “burbujas” de seguridad en Tokio, y se actualizará con protocolos cambiantes a medida que se acerca la inauguración prevista para el 23 de julio. Los Paralímpicos comenzarían el 24 de agosto.
Los deportistas y quienes viajen a Japón —entrenadores, jueces, trabajadores de los medios y celebridades— enfrentarían un periodo de cuarentena antes de salir de sus países. A ello seguirían pruebas en el aeropuerto, al llegar a Japón y durante la estadía, al menos en el caso de la Villa Olímpica frente a la Bahía de Tokio.