El fútbol femenino en México es cosa seria. En la ciudad Monterrey, por lo menos, sus dos clubes han participado en cinco de las seis finales de la Liga femenina. Las futbolistas de Tigres han sido un equipo acostumbrado a la gloria. Este lunes, un día que intenta convertirse en tradición, las felinas han vencido a sus rivales y vecinas para alzar su tercer campeonato de la Liga femenina. El campeonato mexicano fue el primero en América Latina en regresar a la actividad durante y pese a la pandemia de la covid-19.

Las jugadoras de Tigres, bien comandadas por la veterana Liliana Mercado, habían sacado ventaja en la final de ida frente a las Rayadas 0-1 con un gol que se le escabulló a la portera Alejandría Godínez. La felina Lizbeth Ovalle cobró un tiro libre que Godínez no pudo capturar ni desviar. Ya en la final de vuelta, la guardameta de Rayadas se lució con un par de atajadas dignas de póster, aunque la ofensiva salió con la pólvora mojada.

En Tigres, la internacional mexicana Stephany Mayor intentaba concretar las jugadas al ataque que le armaban Katty Martínez y Natalia Gómez Junco. Las jugadoras de Tigres sofocaron a las Rayadas durante la mayor parte del juego con el asedio en la portería. La falta de tino evitó que el triunfo fuera más holgado. Las jugadoras de Tigres se cansaron de fallar a puerta y las Rayadas de perseguir a sus rivales. Estaba liquidado el partido, hasta que, en el último minuto del tiempo agregado, las Rayadas se lanzaron al ataque y, tras una carambola, consiguieron el sufrido gol de Annia Mejía. Un 1-1 in extremis.

Ya en la tanda de los penaltis, las de Tigres soportaron mejor la presión para vencer en el juego mental y, luego, sobre el césped (3-2). La última atajada, de Ofelia Solís, terminó con el intento de pillería de Rayadas y con la consagración del mejor equipo durante el certamen regular: 15 triunfos, un empate y una derrota.

El fútbol femenino celebra, también, el haber roto un récord en la transmisión del partido por Facebook del conjunto de Tigres. Más de 33.000 espectadores siguieron la final a través de la red social, aunque el club felino y las Rayadas han batido récords de asistencia en el fútbol femenino global con 41.615 aficionados en el campo.