Legisladores mexicanos y sus asesores acompañaron a Emilio Lozoya a la CERAweek 2014, una conferencia anual que reúne en Houston, Texas, a ejecutivos y analistas de la industria energética del mundo.
Emilio Lozoya, entonces director de Pemex, fue el orador central de la conferencia, donde agradeció el respaldo de los legisladores para avalar la reforma energética.
“Permítanme saludar con respeto a la delegación de funcionarios mexicanos que está aquí con nosotros; varios secretarios, pero en particular un número significativo de congresistas a quienes quiero agradecer no solo por su presencia, sino por el tremendo apoyo que han dado al sector energético en México. Ellos fueron responsables para la aprobación de la reforma constitucional el pasado diciembre”, dijo.
Sin embargo, tras el ovacionado discurso de Lozoya, la cena de gala estuvo empañada por un pleito digno de cantina protagonizado por dos senadores mexicanos: David Penchyna y Francisco Domínguez.
De acuerdo con la declaración ministerial de Froylán Gracia Galicia, brazo derecho de Lozoya en Pemex y testigo del hecho, Francisco Domínguez tomó una pequeña bandera mexicana que estaba en el centro de la mesa y la puso de cabeza con la amenaza de que así pondrían a Pemex si no les pagaban el dinero que les adeudaban por apoyar al gobierno en su reforma energética.
Penchyna trató de serenarlo a la vez que enderezó la banderita. Domínguez arrebató el adorno y lo aventó contra Penchyna, gritándole que los habían traicionado al no pagarles y lo retó a golpes.
“Esta situación generó conmoción y alteró a las personas extranjeras que estaban sentadas en la misma mesa porque no entendían este desplante”, dijo Gracia Galicia ante la FGR.
En 2014, senadores panistas se comprometieron a dar seguimiento a la aplicación de la reforma energética. Ahora son señalados por recibir sobornos para votar a favor de dicha legislación.
