Juan, cuyo nombre real prefiere mantener en el anonimato, tuvo que ser internado en el hospital ABC de Observatorio, debido a que se contagió de COVID-19. Su atención médica, por 14 días en observación a distancia, 18 en terapia intensiva y 17 en piso superó los 4 millones 300 mil pesos.

El hombre de 50 años, quien trabaja para una empresa familiar, de quienes también pidió conservar el anonimato, en promedio gana 18 mil pesos al mes, con los que debe pagar renta y los gastos de su familia.

Comenzó a presentar síntomas de coronavirus a inicios de abril. Fue canalizado por sus patrones a un laboratorio privado para realizarse las pruebas. Días después conoció el resultado positivo de la prueba al tiempo que los síntomas comenzaban a empeorar. En ese momento se sometió a observación a distancia, desde su casa. Pasaron dos semanas así, hasta que se puso muy grave. Con el apoyo económico de sus patrones pudo ser ingresado al hospital ABC.

Llamaron a una ambulancia para trasladarlo. Se requería un depósito de 300 mil pesos para internarlo. Pasaron algunas horas para que la familia pudiera contar con el dinero solicitado para el ingreso. La salud de Juan se “deterioró mucho”. Presentaba fiebre (39 grados de temperatura), tos y oxigenación de 54 por ciento (el porcentaje promedio es entre 95 y 100 por ciento).

Después de acreditar el pago, fue ingresado e inmediatamente intubado. Ya en terapia intensiva pasó 18 días. El costo aproximado por día fue de 150 mil pesos, sin contar honorarios de los médicos, que, de acuerdo con el estado de salud del paciente, puede variar en personal, en este caso fueron dos, que rondan entre 4 mil y 6 mil pesos por día.

Tras recuperarse, sin estar completamente fuera de peligro, Juan pasó a piso, donde estuvo 17 días. El costo por día ronda los 80 mil pesos, sin contar los honorarios de los médicos que lo atienden.

Treinta y cinco días después regresó a su casa. El traslado costó 15 mil pesos. De todos los gastos se hicieron cargo sus empleadores. Los costos para atención médica hubieran obligado a Juan a destinar su salario íntegro de 19 años y 10 meses para hospitalizarse.

Ya en su domicilio, donde cumplió un mes, sigue con tratamiento. “Va mejor, pero sigue delicado”. Todo el tiempo trae oxígeno. Sólo de medicamentos se han erogado más de 29 mil pesos. De estudios médicos, 5 mil, y de un tanque de oxígeno, 6 mil, sin tomar en cuenta el costo de la atención médica a distancia.