Aarón Padilla Gutiérrez fue estudiante, jugador y directivo universitario. Foto: Mexsport

CIUDAD DE MÉXICO.- Esa manera de caminar, de hacer el trote a paso de ganso por la banda. Además, tenía los pies muy largos ¡calzaba del once! Por eso le decían Gansito al veloz Aarón Padilla, aquel estudiante de la Facultad de Contaduría y Administración de la UNAM, quien tuvo la suerte de probarse con los Pumas y anotarle el gol del triunfo al Toluca, nada menos que en su debut (1962).

Aarón Padilla Gutiérrez murió ayer, la primera víctima del covid-19 en nuestro deporte mexicano. El exfutbolista universitario falleció a los 77 años, luego de complicaciones que terminaron por minar sus pulmones.

Hace varios años que Gansito padecía alzheimer y por ello no recordaba sus años mozos en el club universitario, cuando el uniforme era dorado con rayas azules y la figura del puma no aparecía en la playera.

Quizá olvidó a su inseparable amigo Enrique Borja, con el que hizo diabluras en la delantera estudiantil. Imagine usted al Ganso robar la pelota de cuero, hacer el amague de la bicicleta y escapar por el extremo izquierdo en la cancha de CU. De pronto, mandar el esférico hacia el área chica, donde normalmente aparecía al narigón Borja y, ¡pum!, a celebrar el gol con un ¡goooya!

Tres días duró el infierno en la casa de los Padilla con esto de la pandemia. Aarón batallando con el coronavirus. Los médicos nada pudieron hacer.

Y, mientras la FMF anunciaba el fallecimiento de Aarón Padilla, llega a la memoria aquella dupla universitaria Padilla-Borja, que traspasó fronteras. Ambos debutaron en la Copa de Inglaterra 66 ante Francia. Aquel tanto de Enrique (“¡Borja, no falles, no falles, goool de México”, diría Fernando Marcos) en el primer empate del Tri en una Copa del Mundo. El abrazo entre los amigos, instantes después del gol.

Los amigos volvieron a vestir la camiseta nacional en México 70, donde llegaron hasta cuartos de final. Ayer, en el fallecimiento de Aarón, se cumplieron 50 años de aquella derrota ante Italia (4-1), donde Padilla y Borja se despidieron como mundialistas.

Aarón Padilla tuvo tiempo para vestir los uniformes del Atlante y Veracruz, para regresar al equipo de sus amores y retirarse en 1975.

Como presidente de los Pumas disfrutó el doblete con Hugo Sánchez en 2004, así como el triunfo ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Antes fue diectivo en el Atlante y Potros Neza.

Dirigió la Comisión de Arbitraje y fue asesor en la FMF.

Sus logros se vieron reflejados en 2018, cuando ingresó al Salón de la Fama del Futbol.

Ayer, el número 11 de los Pumas en los años 60 y 70 dejó de existir. Entonces, comenzaron los recuerdos de aquel extremo llamado Gansito.