Debido al Covid-19, un gran número de comercios se han visto afectados, lo que podría frenar el crecimiento económico. Foto archivo: Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó haber abandonado su promesa de campaña de hacer crecer la economía a un 4 por ciento anual, ahora que su gobierno decidió enfocarse en medir la felicidad y el bienestar del pueblo.

El jefe del Ejecutivo federal sostuvo se pueden medir ambos parámetros, pero se tiene que asegurar que el crecimiento sea equitativo y no genere desigualdad en razón de que progreso sin justicia es retroceso.

Por esa causa, es que le preguntará a la gente sobre bienestar material y del alma, ya que no se trabajará para alcanzar un crecimiento “con dictadura y sin libertades”.

“(Se mantiene la promesa) vamos a seguir, se mantiene, tenemos el indicador este del PIB (…) necesitamos medir de otra manera y por las relaciones que se tienen con el Banco Mundial, con el con el FMI, pues van a seguir las mismas mediciones a partir del PIB, pero eso no nos impide que tengamos nosotros una manera distinta de evaluar”, subrayó a la pregunta de si se mantenía firme la promesa de campaña sobre el crecimiento económico para que a finalizar su sexenio México alcance el 6 por ciento de crecimiento económico.

Sobre la nueva forma de medir el crecimiento y el bienestar de los pueblos, mandatario puso el ejemplo del gobierno chino, el cual anunció el fin de semana pasado que derivado de “la gran incertidumbre económica” por la pandemia del Covid-19, no fijará una meta económica para ese año y se enfocará mejor en mantener el empleo y las condiciones de vida de la gente.