NUEVA YORK.- Uno de cada cuatro residentes de la ciudad de Nueva York puede haberse contagiado de COVID-19, según un estudio del gobierno local, que canceló las elecciones primarias del 23 de junio y extendió confinamiento más allá del 15 de mayo.

En la Gran Manzana, epicentro de la pandemia en Estados Unidos, el número de positivos se eleva ahora al 24.7 por ciento, por lo que se estima que más de dos millones de personas pueden haber sufrido ya la enfermedad en la ciudad.

Los datos confirman, además, que la comunidad latina se ha visto afectada de una forma muy desproporcionada, pues un 32 por ciento de las personas estudiadas han padecido la enfermedad, frente a un 16.9 por ciento entre los afroamericanos, un 14.6 por ciento entre los asiáticos y un 8.9 por ciento entre los blancos.

Las minorías se concentran especialmente en el área de la ciudad de Nueva York, la más castigada, mientras que el resto del estado, más rural, es principalmente blanco.

El gobernador Andrew Cuomo apuntó que la investigación muestra que el virus está muy extendido en el estado y que su mortalidad es menor de lo que se podía pensar en un principio.

En una medida sin precedentes, el estado de Nueva York canceló las primarias presidenciales demócratas, fijadas para el 23 de junio.

Cuomo dijo que la orden de quedarse en casa se extenderá más allá del 15 de mayo, pero que las restricciones podrían ser relajadas en algunas zonas que tengan suficiente capacidad hospitalaria y cumplan con otros criterios.

Las peluquerías y restaurantes reabrían en algunas zonas de Estados Unidos, mientras que otras regiones estudiaban hacerlo en varias semanas. “Estoy convencido de que tendremos pruebas suficientes para reabrir. Queremos reabrir nuestro país y los tests no serán un problema”, afirmó el presidente Donald Trump. Agencias