'Los rusos tienen la clara intención de interferir en nuestras elecciones a través de la influencia exterior', apuntó el director del FBI, Christopher Wray.

El director del FBI, Christopher Wray, advirtió ayer que el gobierno de Rusia “sigue teniendo la intención” de influir en las elecciones de Estados Unidos.

“Los rusos tienen la clara intención de interferir en nuestras elecciones a través de la influencia exterior”, apuntó Wray durante una comparecencia ante un comité del Senado.

Resaltó que el FBI destinó “recursos significativos” para hacer frente a la “influencia extranjera” en las próximas elecciones, según informó la cadena de televisión estadounidense CNN.

Wray compareció ante el comité antes de que lo haga hoy el antiguo fiscal especial Robert Mueller, quien destacó en un informe publicado en abril que Rusia llevó a cabo una campaña de influencia durante las presidenciales de 2016, en las que se impuso Donald Trump.

Mueller testificará ante los comités Judicial y de Inteligencia sobre las conclusiones de una investigación que exonera a Trump de conspirar con Rusia para alterar el resultado de los comicios que le llevaron a la Casa Blanca, pero no le absuelven de un posible delito de obstrucción a la justicia.

El presidente de la Comisión Judicial, el demócrata Jerrold Nadler, señaló que hay “pruebas sustanciales” de que Trump cometió delitos.

Para Nadler, el informe de Mueller presenta “pruebas muy sustanciales de que el presidente es culpable de graves delitos”. Si el Partido Demócrata concluye que el testimonio de Mueller ratifica su postura, podría dar un paso más hacia la destitución de Trump.

El mayor obstáculo es ahora mismo la propia presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien ha pedido paciencia para poder construir el caso más sólido posible contra el presidente.