Las amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de cerrar su frontera sur con México están afectando lo que algunos podrían argumentar es el punto más delicado en la relación bilateral: los aguacates.
Ante el temor de que un bloqueo en la frontera impida que México embarque el 80 por ciento de los aguacates que consume Estados Unidos, los procesadores y mayoristas han comenzado a acumular la preciada fruta que se usa para hacer el popular guacamole.
Los precios del aguacate han subido casi 50 por ciento en la última semana solo como consecuencia de este aumento en las compras.
Stefan Oliva, analista principal de investigación de Gro Intelligence, que recopila y analiza datos agrícolas, dijo que los “gerentes de compras, mayoristas y procesadores” están “clamando” por los aguacates en caso de que la frontera se cierre antes de la celebración mexicana del Cinco de Mayo.
Estados Unidos importó casi 2 mil 100 millones de dólares en aguacates de México en 2018, o más de 900 mil toneladas, dijo.
La cifra es aproximadamente diez veces el valor de los aguacates que compra al resto del mundo y más de diez veces lo que Estados Unidos produce actualmente, según muestran los datos de Gro Intelligence.
“Incluso esas amenazas tan vagas son suficientes para asustar a los mayoristas y procesadores que dependen de los consumidores”, dijo Oliva. “Si hay un cierre de la frontera, tendrán que evitarla y pagar una prima extrema”.
Oliva dijo que esta dependencia de un solo país, México, crea una situación en la que “muchos de estos gerentes de compras, mayoristas y procesadores claman por cualquier tipo de aguacate que puedan adquirir en este momento en el raro caso de que la frontera se cierre”.
Trump dio un paso atrás el martes en su amenaza de cerrar su frontera con México para combatir la inmigración indocumentada, ante la presión de compañías que temen la medida provoque caos en las cadenas de suministro, aunque el miércoles volvió a la carga. La medida podría afectar millones de cruces y miles de millones de dólares en comercio.
David Magaña, analista especializado en alimentos y agronegocios en Rabobank, dijo que había observado un aumento del 44 por ciento en el precio de los aguacates durante la semana pasada, y que los precios podrían subir aún más.
“Si la frontera se cierra, eso es un terreno totalmente inexplorado”, dijo Magaña. “Los precios se pueden incrementar considerablemente”.
Alejandro Saldaña, economista jefe de Ve Por Más, banco mexicano que se especializa en préstamos al sector agrícola, dijo que un cierre de la frontera podría afectar también otros productos.
“Podríamos ver efectos en la integración industrial que hay entre México y Estados Unidos”, dijo Saldaña. “Posiblemente haya interrupciones en las manufacturas, particularmente porque mucho producto entra cruzando la frontera”, añadió.