Señalamientos en Times Square, Estados Unidos.Fuente: Bloomberg

El déficit comercial de Estados Unidos se amplió a un máximo de seis meses en agosto, ya que las exportaciones cayeron arrastradas por menores envíos de soya y las importaciones alcanzaron un tope récord, lo que sugiere que el comercio ralentizaría el crecimiento económico en el tercer trimestre.

El Departamento de Comercio informó este viernes que la brecha en el comercio de bienes se agrandó en el octavo mes del año en 6.4 por ciento, hasta los 53 mil 200 millones de dólares, ampliando su saldo negativo por tercer mes consecutivo.

Los datos de julio fueron revisados para mostrar un déficit comercial de 50 mil millones de dólares en lugar de los 50 mil 100 millones de dólares informados inicialmente.

Las sanciones de Trump aún no se han percibido en el déficit, que ha aumentado 8.6 por ciento este año a 391 mil 100 millones de dólares. El déficit con China aumentó 4.7 por ciento en agosto a 38 mil 600 millones, y la brecha con México se amplió en 56.9 por ciento a 8 mil 700 millones, ambas cifras récord.

Trump considera este desequilibrio una señal de debilidad económica, producto de malos acuerdos comerciales y prácticas abusivas por parte de los socios de Estados Unidos, sobre todo China.

Además de imponer aranceles sobre bienes y servicios importados, el gobierno de Trump retiró a Estados Unidos de un acuerdo comercial Asia-Pacífico negociado por el gobierno de Barack Obama y forzó a reformar el tratado de libre comercio con Canadá y México.

Los economistas ortodoxos consideran que el déficit comercial es producto de una realidad económica que difícilmente responderá a los cambios en la política comercial: los estadounidenses gastan más de lo que producen y las importaciones _a menudo más baratas_ compensan esa brecha. La fuerza de la economía estadounidense también alienta a la gente a comprar más productos importados.

El papel del dólar como moneda mundial también afecta las exportaciones de Estados Unidos. El dólar generalmente tiene una alta demanda porque es usado en muchas transacciones internacionales. Por eso mantiene su fuerza, lo que eleva los precios de los productos estadounidenses para desventaja de las empresas del país en los mercados internacionales.