Hope Hicks bajando el pasado agosto del Air Force One MANDEL NGAN AFP

El spin de la puerta giratoria gana velocidad, nunca mejor dicho. Hope Hicks, una de las personas más próximas a la familia del presidente Donald Trump, salta del mundo de la política al de los medios. La antigua directora de comunicación de la Casa Blanca, de 29 años, se incorpora al equipo de dirección del imperio audiovisual de Rupert Murdoch, donde ejercerá como relaciones públicas de la nueva FOX, que es el mayor aliado mediático de Trump.

Hope tendrá el cargo de vicepresidenta ejecutiva en la estructura que hace de paraguas de Fox News, donde tendrá las responsabilidades de directora de comunicación. La exmodelo formó parte del círculo más estrecho de Trump hasta febrero, cuando dimitió tras declarar en el Congreso sobre la investigación de la trama rusa. Empezó a cimentar ese núcleo duro ya durante la campaña que hace dos años llevó al magnate neoyorquino a imponerse en las elecciones presidenciales.

Que Hope Hicks acabe trabajando en el mundo corporativo no es una sorpresa. Es básicamente lo que se espera de la persona que llegó a controlar todo el aparato comunicativo que emana del Despacho Oval. Fue incluso la persona que hizo de filtro para poder acceder al presidente de EE UU. Lo que estaba llamando la atención era el tiempo que había tardado en cuajar el nuevo destino.

El pasado verano se llegó incluso a especular que podría estar de vuelta en la Administración del republicano, tras ser vista a bordo del Air Force One. No le hace falta estar físicamente junto a Trump. Hicks pasa a la nómina del grupo de medios que protege al presidente y que se ha convertido en una cantera de fichajes para Trump. FOX, además, está en proceso de concentrar su contenido en la información, tras vender a Disney los activos de entretenimiento 21st Century Fox.

Es conocido que Donald Trump y Rupert Murdoch, el patrón de FOX, tienen una estrecha relación que les beneficia mutuamente. El fichaje obligará Hope Hicks a mudarse a Los Ángeles, desde donde se gestiona el conglomerado. Por encima de ella tendrá a Viet Dinh, responsable de las cuestiones legales del conglomerado. Es el único en el organigrama le separa de Lachlan Murdoch.

El fichaje se anuncia cuando no pasó una semana desde que la compañía presentara su nuevo nombre. Esta carambola corporativa, de hecho, genera más de una suspicacia. Trump no puso ningún reparo a la operación empresarial. Sin embargo, el presidente no dudó en cargar contra la fusión entre el operador de telecomunicaciones AT&T y el conglomerado de medios Time Warner, que controla la CNN, la cadena que critica casi a diario.

Rupert Murdoch, que presidirá FOX con su hijo, sabe jugar en todo caso a dos bandas. El nuevo equipo ejecutivo incluye a Danny O´Brien. El antiguo directivo del grupo industrial General Electric, que ejerció como jefe de gabinete de varios senadores demócratas, estará al frente de las relaciones con el Gobierno.