Donald Trump sumó una nueva 'victoria' en su poilítica de migración con el fallo que permite ampliar las deportaciones. (EFE)

La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó al gobierno de Donald Trump reanudar las deportaciones expeditas de migrantes a terceros países, suspendiendo una orden judicial que exigía permitirles impugnarlas. Los jueces liberales –Sonia Sotomayor, Elena Kagan y Ketanji Brown Jackson– disintieron.

La medida siguió a un incidente donde ocho migrantes, condenados por delitos graves, fueron enviados a Sudán del Sur, pero el vuelo se desvió a Yibuti tras la intervención de un juez. Estos migrantes, de países como Myanmar, Vietnam y Cuba, no pudieron ser devueltos rápidamente a sus naciones, según funcionarios.

El fallo se enmarca en la agresiva política migratoria de Trump, quien prometió deportar a millones de indocumentados. Sotomayor, en 19 páginas, advirtió que la decisión expone a miles al riesgo de tortura o muerte.

Trina Realmuto, de la Alianza Nacional de Litigios de Inmigración, calificó la orden de “horrible”. Los abogados de los migrantes enviados a Sudán del Sur seguirán litigando.

Tricia McLaughlin, del Departamento de Seguridad Nacional, celebró la decisión como una “gran victoria” para la seguridad.

La Corte Suprema anuló una orden del juez Brian E. Murphy, quien en abril dictaminó que los migrantes deben argumentar el peligro de ser deportados a terceros países. Murphy detuvo deportaciones a Sudán del Sur y los migrantes fueron alojados en un contenedor en Yibuti, bajo duras condiciones.

Estados Unidos ha firmado acuerdos con países como Panamá y Costa Rica para recibir migrantres deportados. Sudán del Sur, independiente desde 2011, enfrenta violencia constante, lo que agrava los riesgos.

Otro caso involucra a venezolanos acusados de pertenecer a pandillas, enviados a una prisión en El Salvador sin posibilidad de apelar. La Corte estableció que deben tener un “tiempo razonable” para impugnar. La mayoría conservadora del tribunal ha respaldado otras políticas, como la eliminación de protecciones para casi un millón de migrantes.