La policía francesa, que investiga el sabotaje de las líneas ferroviarias de alta velocidad horas antes de la Ceremonia de Inauguración de París, pidió ayuda al FBI de Estados Unidos.
Los investigadores recurrieron al FBI después de que varios medios de comunicación recibieran un correo electrónico que, según la policía, podría ser enviado por los autores del ataque. En él se exponía una farragosa lista de agravios, pero no se reivindicaba explícitamente la autoría del ataque.
El correo electrónico, firmado por “una delegación inesperada”, se envió desde una dirección de riseup.net, un colectivo en Seattle que dice proporcionar “recursos de comunicación e informáticos a aliados comprometidos en luchas contra el capitalismo y otras formas de opresión”.
Los saboteadores atacaron con artefactos incendiarios cuatro líneas de TGV de alta velocidad que se dirigían a París, provocando el caos en los desplazamientos horas antes de que una audiencia mundial sintonizara el desfile de los atletas a lo largo del Río Sena el 26 de julio.
No se producieron detenciones. Las autoridades francesas sospechan de grupos nacionales de extrema izquierda, pero no descartan la participación extranjera.
Como riseup.net tiene su sede en Estados Unidos, la policía francesa pidió al FBI que presione a esa organización para que identifique al titular de la cuenta de correo electrónico. El FBI no quiso hacer comentarios.
Riseup no respondió a una solicitud de comentarios enviada por correo electrónico. El FBI tendría que citar a Riseup para que entregue los detalles, pero es poco probable que Riseup acceda.
“Lucharemos activamente contra cualquier intento de citación”, afirma en su página web. El autor del correo electrónico arremetió contra los sectores armamentístico, energético y nuclear de Francia, y criticó la red de TGV por considerar que solo beneficia a “unos pocos privilegiados”.
Ambas fuentes afirmaron que los investigadores franceses aún no han encontrado pruebas firmes de la implicación extranjera.