Una incesante lluvia en la angelópolis impidió ayer domingo, finalizar el tercer y último partido de la serie entre los Diablos Rojos del México y los Pericos de Puebla, decretando la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) un empate y por ende medio juego para cada equipo.
La decisión fue tomada tras haber transcurrido tres horas y media en el estadio Hermanos Serdán sin que el fenómeno meteorológico cesara para poder reanudar el juego, mismo que iba empatado a cuatro carreras por bando cuando se estaba por abrir la sexta entrada del encuentro.
Cabe señalar que este juego definiría al ganador de la serie, luego de que ambas novenas sumaran para su causa un juiego ganado. Los Diablos, se llevaron la victoria en la apertura de estos cuentos el pasado viernes, mientras que los Pericos hicieron lo propio el sábado.
El tercer y último juego de esta tradicional serie se suspendió en punto de las 15:56 horas del domingo ante el desconcierto de los aficionados que habían registrado una buena entrada en el estadio de pelota Hermanos Serdán.
Tras la decisión de decretar el empate en esta serie, ahora los Escarlatas regresarán a su casa, el estadio Alfredo Harp Helú, donde se medirán a partir del martes 16 de mayo, al jueves 18 contra los Tecolotes de los Dos Laredos, en un encuentro que promete muchas emociones.
Emmanuel Ávila se va del “infierno”
En una inusitado movimiento en plena temporada regular, los Diablos Rojos del México decidieron enviar a los Guerreros de Oaxaca al infielder Emmanuel Ávila, uno de los jugadores más queridos de la afición escarlata.
Ávila estaba jugando su campaña 13 con el equipo después de debutar en la Temporada 2010. El 2013 fue el único año en que no formó parte de la Pandilla Escarlata al jugar con los Guerreros de Oaxaca.
Los Diablos Rojos del México agradecieron a Emmanuel Ávila la entrega que mostró a lo largo de su carrera con el equipo, deseándole mucha suerte en esta nueva etapa.
