La Feria internacional del Libro (FIL) de Guadalajara operará sin presidente hasta 2025, según ha anunciado en un comunicado la Universidad de Guadalajara. El lugar que ocupó Raúl Padilla hasta su muerte, el 2 de abril, quedará vacío en las próximas ediciones “a manera del homenaje” a una persona que la casa de estudios considera “insustituible”. Sus funciones en el Consejo Administrativo del encuentro editorial más importante en español serán asumidas por la directora de la feria, Marisol Schulz.
Los estatutos de la FIL de Guadalajara establecen que el presidente de la feria debe ser elegido por el rector de la Universidad de Guadalajara, que en este caso es Ricardo Villanueva. Villanueva ha avisado que no ejercerá su facultad mientras ocupe el puesto. “Es como cuando los equipos deportivos retiran el número de un jugador histórico para recordar sus hazañas y subrayar que ese jugador es insustituible. Eso es para nosotros el licenciado Raúl Padilla”, se lee en el comunicado.
La designación recaerá sobre la próxima persona que sea nombrada rectora de la universidad. La casa de estudios ha asegurado que la decisión de dejar vacía la presidencia no afectará “de ninguna manera” las funciones operativas, administrativas y jurídicas que correspondían a Padilla al frente de la feria. El encuentro, que se realiza en la capital del Estado de Jalisco desde hace 37 años, tendrá como invitados de honor en las próximas ediciones a la Unión Europea (2023) y España (2024).
Padilla fue hallado muerto el 2 de abril por la mañana. Tenía 68 años. Según la Fiscalía, se trató de un suicidio. “De forma preliminar fue localizada en la escena una arma de fuego, así como un recado póstumo”, comunicó el ministerio público. Personalidades de la cultura y la política lamentaron su fallecimiento. Padilla, que era licenciado en Historia, fundó la FIL de Guadalajara en 1987. Dos años después, fue nombrado rector de la Universidad de Guadalajara. En ese periodo, impulsó una reforma universitaria. Y después, también fue candidato político. Los últimos años estuvieron marcados por su enfrentamiento con el gobernador del Estado de Jalisco, Enrique Alfaro, y con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Padilla fue “un hombre de contrastes profundos”, escribió el escritor Antonio Ortuño tras la muerte de Padilla en este periódico. La creación de la FIL y el “modelo de universidad autónoma y extendida a todo Jalisco” fueron parte de su legado, según destacó el autor. El periodista Salvador Camarena enumeró la “miríada de facetas” que podrían haberlo definido: “Cacique, visionario, gángster, educador, pistolero, hombre de letras, cine y música, nepotista, político, humanista…”. “Quienes quieran sucederlo, o aquellos que pretendan adueñarse de esa casa de estudios deben ofrecer, mínimo, llenar tan polémicos pero exitosos zapatos”, escribió.
