Personas caminan por una calle sin iluminación auxiliándose con la luz de su celular durante un apagón en La Habana, Cuba. ((EPA) EFE)

Los apagones afectarán el 20.3 por ciento de Cuba en la tarde-noche de este lunes por quinto día consecutivo en el que los cortes se encuentran por encima del 10 por ciento del territorio, según la estatal Unión Eléctrica (UNE).

La compañía calcula para esa franja horaria, considerada la de mayor consumo, una capacidad de generación eléctrica de 2.346 megavatios (MW) y una demanda de 2.855 MW. El déficit -la diferencia entre oferta y demanda- será de 509 MW y la afectación -lo que se desconectará realmente- se ubicará en los 579 MW.

Las recientes caídas del sistema eléctrico nacional -cuatro en menos de diez días- provocaron que volvieran a registrarse notables índices de afectación, aunque sin llegar a los del año pasado cuando alcanzaron el 40 por ciento o más.

Cuba registró el miércoles pasado la cuarta caída de su sistema eléctrico que dejó a oscuras a más de la mitad del país. La causa fue la avería de una línea de alta tensión, según explicó la UNE.

La semana anterior ocurrió otro corte similar que afectó desde Matanzas (oeste) hasta Guantánamo (sureste) durante seis horas. El fallo del servicio eléctrico fue atribuido a “un error humano” por las autoridades del sector.

En ese periodo se reportó otro corte eléctrico que afectó el suministro desde la provincia de Sancti Spíritus (centro-este) hasta Guantánamo, pero debido a un incendio en una zona rural.

Este domingo, la UNE refirió que estaban fuera de servicio por avería tres unidades generadoras de distintas centrales termoeléctricas (CTE), mientras otras cuatro unidades de tres CTE se encuentran en mantenimiento.

¿Cuáles son las causas de los apagones en Cuba?
La situación de la red cubana es precaria y se reflejó el año pasado en apagones diarios que alcanzaron hasta las 12 horas en algunas regiones. Entre las causas están la antigüedad de las ocho plantas termoeléctricas terrestres con un promedio de más de 30 años, el déficit de inversiones y la falta de combustible.

Los apagones disminuyeron de forma notable desde la segunda quincena de diciembre de 2022, y se han mantenido a niveles menores en las primeras semanas de 2023, con afectaciones por debajo del 10 por ciento en horario de máxima demanda.

El Gobierno informó recientemente que está previsto un promedio de interrupciones por apagones de unas tres horas diarias hasta mayo próximo por mantenimientos programados a las centrales termoeléctricas.