Lionel Messi defiende el balón ante Andrés Guardado durante el Mundial de 2010, en Sudáfrica. LATINCONTENT (LATINCONTENT VIA GETTY IMAGES)

El Argentina contra México tiene tintes de un clásico latinoamericano. Ambos combinados se han enfrentado tres veces en las Copas del Mundo y, en general, siete veces en partidos oficiales de la FIFA. La estadística abruma: los argentinos han ganado seis de esos encuentros y México solo uno. Los tiempos, los jugadores y la presión ha sido muy distinta en cada uno de los casos. Ahora, en 2022 sobre los argentinos planea la sombra de la ansiedad porque si pierden contra el Tri quedan fuera del Mundial.

La última vez que México venció en un encuentro oficial a los argentinos fue en 2004, en la fase de grupos de la Copa América de 2004, en Perú. Aquella Albiceleste dirigida por José Pékerman no pudo sobreponerse a un tiro libre cobrado por el mexicano Ramón Morales al minuto. Un tiro preciso que dejó estático al Pato Abbondanzieri. El equipo mexicano estaba formado por Rafa Márquez, Pável Pardo y Jared Borgetti. El entrenador era el argentino Ricardo La Volpe. El resto de encuentros oficiales han sido triunfos argentinos.

México y Argentina se han cruzado tres veces en las Copas del Mundo. La Albiceleste de 1930 llevó al Tri al rincón más oscuro de la estadística: la primera gran goleada en el naciente torneo mundial. Ese 6-3 machacó los sueños de un México que intentaba acercarse al fútbol. Ese año los argentinos llegaron a la final, aunque los uruguayos arrollaron 4-2. En 2006, ambos conjuntos chocaron en octavos de final. Un gol de Márquez adelantaba por sorpresa a los suyos. El empate fue de Hernán Crespo. En la prórroga Maxi Rodríguez clavó un golazo en la portería. Mucha agonía para los de Pékerman. En cifras, los mexicanos remataron más que los argentinos: 17 frente a 12. Sin embargo, de esos 17 solo dos fueron a puerta; mientras que de cinco tiros argentinos al portero Oswaldo Sánchez entraron dos. Los mexicanos cometieron hasta 28 faltas frente a las 23 de Argentina. En la siguiente ronda, a los de Riquelme y compañía los echó Alemania en los penaltis.


En 2010, la Argentina de Maradona ganó 3-1 frente al México de Aguirre. El primer gol, de Carlos Tévez, entró en la polémica debido a que el jugador estaba en fuera de lugar. Más allá de las polémicas, los argentinos remataron 17 veces por 12 de México, sin embargo, de esas 17 chances argentinas cinco fueron dirigidas contra el portero y tres en gol. México chutó 12 veces y la mitad de estas fueron entre los tres palos. En cuartos de final, los alemanes volvieron a despachar a los sudamericanos (4-0).

El factor Ochoa
El guardameta Guillermo Ochoa fue suplente en 2006 y 2010. Esta vez será su primer enfrentamiento contra Argentina en un partido oficial. También será la primera vez que se mida con Messi. Lo que sí ha jugado es un amistoso frente a Argentina. Fue en 2019 cuando Messi no formaba parte del equipo. Los argentinos ganaron 4-0 en San Antonio, Texas con un triplete de Lautaro Martínez y uno de Leandro Paredes. Los argentinos hicieron los goles en menos de media hora. Los mexicanos no tuvieron respuesta.

La esperanza mexicana es tener un guardameta sólido. Y ahí Guillermo Ochoa emerge en las Copas del Mundo. En 2014 se encargó de amargarle la fiesta a Brasil en casa cuando se lució con una serie de atajadas cuando las probabilidades daban por perder y por goleada a los mexicanos. En los cuatro partidos que jugó sumó 10 atajadas clave. La defensa mexicana permitió hasta 50 remates, entre desviados y bloqueados.

El registro de atajadas de Ochoa se duplicó en 2018, principalmente, por el partido contra Alemania que ganó con sus compañeros: 25 paradas, un promedio de 6,25 por encuentro, según información de Stats Perform. En el Mundial de Rusia hubo 78 remates en contra y 60 a favor. En Qatar, Ochoa solo tuvo en contra un remate a puerta de los polacos y el penalti que le atajó a Lewandowski. En total: los europeos chutaron ocho veces bien frustrados por la zaga defendida por César Montes y Héctor Moreno.

El duelo de ofensivas, los mexicanos tuvieron hasta 13 remates a puerta, donde 10 fueron dentro del área. Los dirigidos por Scaloni chutaron 14 veces, con una decena de veces intentadas frente al portero Mohammed Alowais de Arabia Saudí. El guardameta Emiliano Martínez solo estuvo en peligro tres veces, con dos goles en contra.