Marcelo Ebrard durante el primer encuentro con diputados locales y regidores de Morena en Guadalajara, Jalisco. Foto: FERNANDO CARRANZA (CUARTOSCURO)

El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, ha decidido lanzarse de lleno a la campaña de Morena para suceder a Andrés Manuel López Obrador en 2024. El canciller ha anunciado este domingo durante un acto en Guadalajara que conformará un equipo para “ganar la encuesta” interna. Lo presidirá la senadora por Guanajuato Malú Micher, presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, y lo integrarán más de 300 cargos del movimiento. “Vamos a ir a escuchar, a proponer, a organizarnos y mantener las ventajas en todas las encuestas”, ha proclamado Ebrard, quien ha recordado en la puesta de largo de su candidatura que el propio mandatario ya le señaló en cinco ocasiones. “Hubo mucha especulación: que si es un destape la reunión de hoy, que cuál es el objetivo. Déjenme decir algo: a mí el presidente ya me destapó cinco veces, en las mañaneras”, ha afirmado.

En las quinielas, conocidas como juego de las corcholatas, o chapas, López Obrador ha colocado en varias ocasiones al máximo responsable de la diplomacia mexicana, a la jefa de Gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, o al secretario de Gobernación, Adán Augusto López. A ellos se suma el líder de la bancada en el Senado, Ricardo Monreal, molesto en las últimas semanas por la anticipación con la que se abrió la carrera del relevo presidencial. Cuando faltan dos años para las elecciones, la mayoría de los focos del debate político se concentran en la vida interna de Morena y en la sucesión, mientras la alianza opositora aún no ha logrado reponerse de la derrota de 2018 y, sin liderazgos con capacidad de hacerle sombra al partido oficialista, sigue sumida en una travesía del desierto.

Por eso también es tan relevante esa competición interna y por eso los principales aspirantes van tomando ya posiciones. “Vamos a organizarnos, vamos a caminar, vamos a recorrer toda la república mexicana, todos los Estados de la república mexicana para escuchar, para escuchar como estamos escuchando hoy los puntos, las propuestas, y después proponer”, ha insistido Ebrard, quien ha llamado a sus seguidores a ser cuidadosos con las reglas establecidas por el Instituto Nacional Electoral (INE).

Entre aplausos y gritos de “presidente, presidente” y acompañado de Santiago Nieto, hasta el pasado noviembre titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), el secretario de Relaciones Exteriores ha aclarado que ni siquiera ha comenzado formalmente la precampaña. “En lo que estamos es en participar en una encuesta dentro del movimiento que es la coordinación a nivel nacional de la defensa de la cuarta transformación. Eso es lo que queremos compañeras y compañeros, ganar esa encuesta, nos vamos a organizar para eso”, ha especificado. La votación interna, según adelantó el pasado domingo Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, se celebrará dentro de un año, aproximadamente, mientras que en los próximos meses la formación renovará su estructura local hasta la celebración de un congreso.

Ebrard, en efecto, encabeza junto con Sheinbaum la mayoría de los sondeos realizados hasta ahora, aunque Adán Augusto López, un cargo muy próximo a López Obrador y exgobernador de su Estado natal, Tabasco, va sumando poco a poco preferencias sobre todo de la mano de la militancia. El equipo que acompañará al canciller en la carrera, además de Micher, tendrá a otros senadores en la primera línea: José Narro, Lupita Covarrubias, José Ramón Enríquez, Joel Padilla. Además, habrá más de 25 diputados federales y unos 300 legisladores locales, alcaldes y regidores.

“Le vamos a pedir a la senadora Malú Micher que nos organice una propuesta para el tema de la encuesta y ya que la tengas ya nos dices para que instalemos un comité que nos represente en el partido, que nos represente y que opine cómo se debe de hacer el ejercicio”, ha indicado Ebrard. Este mismo sábado, el presidente insistió en que ha llegado el momento de pensar en el relevo aunque le queden todavía dos años y tres meses al frente del Gobierno.