Un soldado ucranio inspecciona los escombros de un edificio de apartamentos muy dañado por los bombardeos en Kiev este martes. Foto: FADEL SENNA (AFP)

Mientras arrecian los ataques rusos contra zonas residenciales en Kiev, tres jefes de Gobierno de países de la UE ―Polonia, República Checa y Eslovenia― han llegado este martes a la capital ucrania en una iniciativa de la que se ha distanciado la Comisión Europea. “Esta guerra es resultado de un cruel tirano que ataca a civiles indefensos y bombardea ciudades y hospitales en Ucrania. Tenemos que detener esta tragedia en el Este lo antes posible. Por eso […] estamos en Kiev”, ha señalado por la tarde el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, en una publicación en Facebook localizada en la capital ucrania.

Morawiecki; su vice primer ministro y líder del partido ultraconservador Ley y Justicia, Jaroslaw Kaczynski; el primer ministro checo, Petr Fiala, y su homólogo esloveno, Janez Jansa, han llegado en tren a través de la frontera polaca. En Kiev, prevén reunirse con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, y su primer ministro, Denis Shmyhal, para transmitirle el “apoyo inequívoco” de los Veintisiete, ha informado la oficina de Morawiecki en un comunicado. Jansa también ha hecho una publicación en Facebook con localización en Kiev en la que señala que “los valores europeos están amenazados” y “no hay país en todo el continente más europeo que Ucrania”.

Varsovia ha puesto en marcha la iniciativa pese a no contar con el respaldo de la UE y de que el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, advirtió de los riesgos de seguridad que implicaba el viaje, según indican fuentes comunitarias en Bruselas. Es la primera visita a la ciudad de dirigentes internacionales desde el inicio de la ofensiva rusa hace casi tres semanas.

El jefe de gabinete de Morawiecki, Michal Dworczyk, ha señalado que no hay otros dirigentes comunitarios en el viaje porque “no todos estaban dispuestos a participar”. Esta es una “decisión individual”, ha agregado, según la agencia polaca PAP.

El desplazamiento, que también tiene como objetivo “presentar un amplio paquete de apoyo a Ucrania y a los ucranios”, ha sido organizado ―sostiene la oficina del primer ministro polaco― “tras consultar al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen”. “La comunidad internacional ha sido informada del viaje a través de organizaciones internacionales, entre ellas la ONU”, concluye la nota.

Fuentes oficiales de la UE indican que, efectivamente, Michel y Von der Leyen “fueron informados de la intención de viajar a Kiev durante la cumbre europea informal que se celebró en Versalles el pasado jueves y viernes”. Morawiecki les confirmó el lunes por la noche que el viaje se haría finalmente con la participación de los primeros ministros de la República Checa y de Eslovenia, según las fuentes europeas.


“Riesgos de seguridad”
Las mismas fuentes indican que Michel advirtió a Morawiecki de “los riesgos de seguridad” que plantea la iniciativa. Un ataque ruso, fortuito o deliberado, contra una comitiva europea podría suponer una escalada internacional en el conflicto de consecuencias imprevisibles para Europa, sobre todo porque los tres países participantes pertenecen a la OTAN. El tratado de la Alianza Atlántica prevé que en caso de ataque contra uno de los aliados, todos los demás deben responder.

Bruselas, por si acaso, se ha distanciado de la iniciativa polaca. Y fuentes comunitarias han subrayado que, en contra de lo sugerido por Varsovia, Praga y Liubliana, el viaje a la capital ucrania “se hace sin ningún mandato del Consejo Europeo”. Y recuerdan que en la cumbre de Versalles los 27 socios de la UE no adoptaron ninguna conclusión formal al respecto.

Al margen del gesto político de apoyo que representa la visita en medio de una guerra que cumple su vigésimo día, la UE prefiere redoblar la presión sobre Rusia con un golpe económico sin precedentes. Von der Leyen ha aplaudido este martes la “rápida aprobación” de un cuarto paquete de sanciones contra Rusia, que “paralizará aún más la capacidad de Putin para financiar esta guerra injustificada”.

La presidenta de la Comisión ha recalcado que “la UE y sus socios mantendrán la presión sobre el Kremlin hasta que detenga la invasión de Ucrania”. El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha respondido: “No nos van a parar las sanciones, vamos a seguir trabajando”.

El viaje de los líderes comunitarios se produce el mismo día en el que Moscú y Kiev han retomado las negociaciones que iniciaron el lunes, según ha confirmado en sus redes sociales Mijailo Podoliak, asesor del presidente Zelenski. En esta jornada, la cifra de refugiados ucranios a los países vecinos, sobre todo Polonia, ha alcanzado ya los tres millones, según la Organización Internacional de Migraciones, y los ataques rusos contra zonas residenciales en Kiev se han recrudecido.