La firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994 fue benéfico para el campo mexicano, ya que forzó a que el sector agroalimentario nacional fuera competitivo.
Pero desarrollar esta capacidad tomó su tiempo, ya que entre 1994 y 2014 la balanza agroalimentaria de México fue negativa para posteriormente ser superavitaria, indicó Juan Cortina, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), durante su participación en El Financiero Meet Point.
Para el experto, fueron cuatro los factores que hicieron competitivo al campo mexicano. El primer punto fue la integración de las cadenas productivas en la región de Norteamérica.
Como segundo factor, Cortina Gallardo destacó el reconocimiento del estatus fitosanitario y las certificaciones de calidad e inocuidad del país.
“Hoy en día México está dentro de los cinco países más limpios a nivel mundial de enfermedades vegetales y animales, ese es nuestro pasaporte hacia los mercados externos, es un bien público que ayuda a pequeños, medianos y grandes, y que ha tardado estos últimos 30 años poderlo construir”, apuntó el especialista.
La implementación de nuevas tecnologías también jugó un rol muy importante en el sector y como último punto está el hecho que el país logró posicionar los productos agroalimentarios en el mercado mundial. Por otra parte, el presidente del CNA afirmó que la sanidad e inocuidad del campo mexicano lo hace uno de los más limpios en todo el mundo, lo que permite que sus exportaciones alcancen más mercados .
Aplicación del glifosato
La prohibición del glifosato en el campo mexicano podría causar estragos muy grandes en la producción de alimentos a nivel doméstico.
“Podemos llegar a tener pérdidas de hasta 40 o 50 por ciento, son estudios que se han hecho en granos básicos”, afirmó Rogelio García Moreno, vicepresidente agrícola del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), durante su participación en el evento.