BOGOTÁ.- Aficionados de America de Cali se desbordaron a las calles tras la conquista del 15to campeonato del club en la liga colombiana de fútbol, el segundo consecutivo, en un festejo que dejó 88 heridos —11 de ellos con arma de fuego_, informaron las autoridades.
Los hinchas quebrantaron la ley seca y el toque de queda, utilizaron fuegos artificiales y se aglomeraron en diferentes lugares de Cali, capital del departamento del Valle del Cauca, y en poblaciones vecinas.
La celebración arrancó el domingo por la noche luego que Los Diablos Rojos con un marcador global de 3-2 vencieron al local Santa Fe de Bogotá y se adjudicaron el torneo Apertura.
Ganaron 3-0 el duelo de ida y Santa Fe 2-0 el de vuelta pero no le alcanzó para igualar la final y forzar la instancia de los penales.
La secretaria de Salud del Valle del Cauca, María Cristina Lesmes, precisó el lunes a Radio Blu que 88 personas resultaron heridas —60 en Cali y 28 en el resto del departamento_, incluyendo cinco niños.
El comandante de la policía de Cali, el general Manuel Antonio Vásquez, indicó a los medios que además de los 11 heridos con arma de fuego, hubo 21 con arma blanca y 28 en accidente de tránsito. Tres de los heridos se encuentran en cuidados intensivos, seis permanecen hospitalizados y el resto fue dado de alta.
Lesmes y el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, temen que las aglomeraciones de aficionados disparen los contagios de coronavirus y en unos días no haya suficientes unidades de cuidados intensivos en los hospitales para atender a los afectados.
Ospina era partidario de que la transmisión del encuentro no se limitara a circuito cerrado.
Desafortunadamente se hizo caso omiso (a su iniciativa) a que el partido fuese transmitido por televisión abierta para evitar congregaciones en espacios de señal cerrada”, manifestó el alcalde a Caracol Televisión.
Las alcaldías de Cali y Bogotá para evitar aglomeraciones e incidentes impusieron ley seca y toque de queda el domingo y la madrugada del lunes.
La alcaldesa Claudia López destacó el lunes que no hubo incidentes en la capital colombiana pero la situación fue distinta en Cali.
El duelo de ida en Cali una semana atrás hubo desórdenes con un saldo de cinco policías heridos, uno de ellos con un disparo en la cabeza, y 40 detenidos. Todo se complicó el domingo en la celebración tras la obtención del título.
Los dos clubes rojos se enfrentaron en el de vuelta en el estadio El Campín de Bogotá.
En Colombia está prohibido el ingreso de aficionados a los estadios desde septiembre, cuando se reanudó la actividad futbolística suspendida en marzo por la pandemia.