Luis Niño de Rivera, presidente de la ABMCuartoscuro

En México, la banca sí está prestando, pero son las empresas y las personas que siguen siendo prudentes en la solicitud de nuevos financiamientos ante la incertidumbre que hoy ser vive generado por la pandemia, afirmó Luis Niño de Rivera, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).

En videoconferencia, respondió a la crítica hecha por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de que no estaban asumiendo riesgos ni prestando.

Niño de Rivera afirmó que la banca asume riesgos, pero cuidando el dinero de los ahorradores e insistió en que ha visto prudencia de los clientes para pedir un crédito.

El ejecutivo indicó que es “es una percepción del secretario de Hacienda; él quisiera que la banca prestara más, el tema del crédito es dual, es un tema de oferta y de demanda. La banca se dedica a la intermediación, que es tomar recursos del público y prestarlo, pero tiene que haber demanda para que eso suceda”.

EL miércoles, el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Arturo Herrera., aseguró que la banca comercial en México ha mantenido niveles altos de capital, pero no ha utilizado las facilidades de liquidez que el Banco de México puso en marcha durante la pandemia, y tampoco ha fomentado el otorgamiento del crédito.

En el “sector financiero, hay mucho que trabajar con los bancos, porque las facilidades de liquidez del Banco de México (Banxico) que se dieron no han sido utilizadas en su totalidad”, indicó.

Ejemplificó, que, para hacer uso de estas facilidades, la banca comercial pedía que estuvieran respaldados por la banca de desarrollo.

“Los niveles de garantías que pedían eran de 90 por ciento. Eso quiere decir que no estaban tomando ningún riesgo. Ha subido su índice de capital, de 15 a 17 por ciento, pero también es sintomático que no están prestando”, explicó el funcionario durante su participación en la Reunión Anual de Consejeros Regionales organizado de forma virtual por el Grupo BBVA México.

Sin embargo, los datos actuales muestran esta prudencia del uso del crédito en las tarjetas de crédito y de débito, remarcó Niño de Rivera. En el caso de las primeras, éstas han dejado de ser utilizadas y las segundas se ha incrementado sustancialmente su uso.

“(Con) Las gráficas de las tarjetas de débito y crédito es clarísima la prudencia de no usar las líneas de crédito disponible, porque están cuidándose, la situación es difícil. La demanda de crédito se atiende puntualmente en la banca, el crédito hipotecario no ha bajado la demanda, la competencia está y ofrecen hoy tasas más bajas, la banca sí está prestando”, dijo el titular de la ABM.

“Que las personas y las empresas decidan no tomar crédito en este momento, es una señal de prudencia, tenemos que manejar toda esta crisis con mucha inteligencia y cuidado. No es un tema de justicia, sino de manejo prudente del crédito”, agregó.

Acerca de la segunda fase de apoyos que se están dando a algunos clientes, explicó que al cierre de septiembre la banca ha reestructurado créditos por un monto de 75 mil millones de pesos. El esquema de reestructuras es opcional para la banca y se sustenta en la capacidad de pago del cliente