WASHINGTON.- El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, y su rival, la demócrata Kamala Harris, se enfrentarán este miércoles en su único debate televisado antes de los comicios de noviembre, en momentos en que el diagnóstico de covid-19 del mandatario Donald Trump y el avance de la pandemia continúan acaparando la atención.

El debate se realizará en un escenario complicado para la campaña de Trump y Pence por la reelección, menos de una semana después de que el presidente republicano anunció que se había contagiado de covid-19 y de que informó de un brote entre funcionarios de alto perfil de la Casa Blanca.

El exvicepresidente Joe Biden, el candidato demócrata, lleva una ventaja significativa sobre Trump en las encuestas nacionales, incluyendo una diferencia de 12 puntos porcentuales en el último sondeo de Reuters/Ipsos entre posibles votantes, cuando faltan menos de cuatro semanas para las elecciones.

Tarde el martes, las dos partes aún reñían por el pedido de Harris de instalar barreras de policarbonato en la sala para reducir las posibilidades de una infección.

La cadena CNN reportó que un miembro de la comisión que supervisa el debate dijo a que Pence se le permitiría participar sin el panel plástico, en tanto que Harris tendría uno a su lado si es que así lo prefería.

Pero Pence y Harris, una senadora, han arrojado negativo en las pruebas de coronavirus tomadas el martes.

Las actuales normativas del Gobierno llaman a cualquier persona que haya estado expuesta a un contagiado con covid-19 a guardar cuarentena por 14 días, sin considerar los resultados de los exámenes.

El portavoz de Pence no respondió una solicitud de comentarios.

En un comunicado, la portavoz de Harris, Sabrina Singh, dijo:

Si la guerra a los cubrebocas del Gobierno de Trump se ha convertido ahora una guerra contra las barreras protectoras, eso te dice todo lo que necesitas saber sobre por qué la respuesta al covid-19 es un fracaso”.

En vista de que dos candidatos mayores de 70 años se disputan la presidencia este año, el debate del miércoles puede ser más importante que en campañas anteriores. Tanto Pence como Harris intentarán demostrar que pueden ocupar el Salón Oval de la Casa Blanca si resulta necesario.

Trump, de 74 años, regresó el lunes a la Casa Blanca tras permanecer hospitalizado tres días. No queda claro si participará de nuevo en mítines de campaña pero ha dicho que planea acudir al debate presidencial del 15 de octubre.