Tras una visita navideña a México, el pasado sábado 4 de enero, fue baleada en Tamaulipas la camioneta en la que viajaba Abdiel, un menor de 13 años, quien murió a manos del crimen organizado. En la frialdad de los datos, se convirtió en uno de los 3.6 menores que mueren al día a causa de la violencia en el país, según el último informe de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) presentado ayer.

La muerte de Abdiel es apenas un botón de muestra de lo que sucede en México y quedó plasmado en el estudio elaborado por la red que agrupa a 75 organizaciones de la sociedad civil.

En el documento se destaca que, desde el año 2000 al cierre de 2019, hay cerca de 21 mil niñas, niños y jóvenes víctimas de homicidio doloso, y más de 7 mil casos de niños desaparecidos, sin que la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador haya presentado alguna estrategia para detener la epidemia de violencia que afecta a esta población.

Los datos muestran la urgencia para que el gobierno cumpla con los compromisos firmados el 30 de abril de 2018, cuando todavía estaba en campaña, denunció Juan Martín Pérez, director de Redim, al acudir temprano a Palacio Nacional para entregar el informe a Presidencia.

“Nosotros estamos señalando invisibilidad, violencia y la oportunidad de cambio, nos parece que son los tres temas que tenemos de 2019 y que nos encantaría que uno de los propósitos de año nuevo para esta administración sea colocar a los niños y niñas en el centro”, subrayó Pérez García en entrevista con El Financiero.

De acuerdo con datos del informe ‘La Infancia Cuenta en México 2019’, durante el año pasado se han presentado un promedio de 12 víctimas de trata de personas entre 0 y 17 años cada mes; siete de cada 10 de éstas han sido niñas o adolescentes mujeres.

Chiapas (79), Chihuahua (58), y Baja California (48), son las entidades donde este delito más les afecta.

En el caso de homicidios dolosos de menores, Guanajuato se convirtió en la entidad con mayor número, pero la cuarta en cuanto a tasa.

Además, al menos 30 mil niños y jóvenes habrían sido reclutados por grupos delictivos.

Pero los datos no sólo los sustenta la Redim, desde 2011 el Comité de Derechos del Niño de la ONU recomendó a México revisar la estrategia de seguridad ante el impacto negativo para millones de niños en el país.

La petición concreta para el gobierno de México, según Pérez García, es crear un programa estratégico número 26 que proteja a la infancia mexicana y así se cumpla con los preceptos del artículo cuarto constitucional.