El salario mínimo general para el 2020 debería alcanzar los 127.76 pesos, propuso este jueves la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Esto con base en la implementación de una nueva cultura salarial en el país y en estudios económicos y de mercado laboral. En tanto, para la zona de la frontera norte, sugiere aplicar únicamente un alza del 5 por ciento.
Según lo que el organismo planteó a la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, se debería partir del salario mínimo que opera para todo el país (actualmente de 102.68 pesos) y dar un incremento de nueve pesos en Monto Independiente de Recuperación (MIR), que es el componente fijo, más un alza de 5 por ciento en el componente variable acorde a la inflación, para llegar a 117.72 pesos.
Para alcanzar el nivel máximo, se propone fijar 19 pesos de MIR, más un alza porcentual del 5 por ciento, llevando así el salario a 127.76 pesos para 2020.
En la zona de la frontera norte el aumento del salario no debería de contar con un componente fijo como el MIR, sino incorporar el porcentaje vinculado a la inflación, de tal manera que progresivamente se pudieran alinear los dos salarios mínimos para que el país pudiera contar otra vez con una sola zona económica.
En la Zona Libre de la Frontera Norte, el salario mínimo actual es de 176.72 pesos.
“No puede sostenerse de manera permanente que haya mexicanos de primera o de segunda, según la región geográfica donde tiene establecido su domicilio o prestan sus servicios laborales”, señaló.
Con este progreso en el aumento salarial, es como será posible que al final de esta administración, en 2024, se pueda alcanzar la línea de bienestar familiar que implicaría llegar a los 243.96 pesos para que, con el ingreso de dos aportantes, se puedan satisfacerse las necesidades de una familia promedio mexicana integrada por 3.7 personas, explicó la Coparmex.
“Una evolución salarial de esa envergadura implicará un importante esfuerzo económico para muchas empresas, especialmente, en un contexto de nulo crecimiento económico, anteponiendo la responsabilidad social empresarial”, indicó Gustavo de Hoyos Walther, presidente de la confederación.
La nueva cultura salarial planteada por el organismo empresarial incluye medidas adicionales que buscan el beneficio real del trabajador, como la deducción plena de prestaciones laborales; reestablecer la deducción al 100 por ciento de aportaciones para la creación o incremento de reservas para fondo de pensiones y una reestructura del esquema de pago de utilidades para fomentar la productividad.