La confianza del consumidor reportó un incremento de 1 punto durante el ‘mes patrio’, lo que ubicó al indicador en 44.67 puntos, su mayor nivel en los últimos cinco meses, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en conjunto con el Banco de México (Banxico).
Tras alcanzar su máximo histórico en febrero, la confianza del consumidor entró en una racha negativa que perduró por cinco meses. Esta trayectoria descendente se interrumpió en agosto con un ligero incremento de 0.37 puntos.
Actualmente, el espaldarazo de confianza de los hogares mexicanos acumuló dos meses consecutivos de incrementos, derivado de un aumento generalizado en los cinco indicadores que integran el estudio.
Juan Carlos Alderete y Francisco Flores, analistas de Grupo Financiero Banorte, prevén que la confianza del consumidor retomará una tendencia a la baja en los próximos meses.
“La desaceleración en el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y la creación de empleos formales eventualmente impactaran a la confianza, sobre todo a los subíndices de los hogares y el de compra de bienes duraderos, esto podría suceder incluso si los subíndices sobre las condiciones del país se mantienen relativamente estables, todavía correlacionados con la aprobación presidencial, la cual se ha mantenido fuerte”, dijeron.
Optimismo en el país impulsa la confianza
Los indicadores que pretenden medir como se sienten los consumidores mexicanos respecto a las condiciones presentes y futuras del país fueron los que mostraron el mayor crecimiento del mes.
La situación económica del país, hoy en día, comparada con la de hace 12 meses se estableció en 42.7 puntos, lo que significó un incremento de 2 puntos respecto a agosto.
A su vez, la situación económica del país dentro de 12 meses, respecto a la actual, creció 1.6 puntos, lo que ubicó al respectivo indicador en 50.6 puntos, su mayor nivel en cuatro meses.
Por otra parte, las perspectivas de la ‘economía del hogar’ expusieron incrementos más moderados.
Al preguntarle a los encuestados sobre la situación económica en el momento actual de los miembros del hogar comparada con la que tenía hace un año, se observó un incremento de 1.1 puntos, fijando al indicador en 49.1 puntos.
Respecto al concepto que interroga sobre la situación económica esperada de los miembros del hogar dentro de 12 meses, respecto a la actual, se observó un dinamismo de 1.2 puntos, lo que estableció al índice en 56.9 puntos.
El único componente que no mostró variaciones respecto al mes previo fue el que evalúa la posibilidad de adquirir bienes duraderos, como lo son muebles, televisores, lavadoras y otros aparatos electrodomésticos, al ubicarse en 24.5 puntos, cifra idéntica a la de agosto.
Este indicador sorprendió a los analistas de Banorte, ya que la tendencia descendente de la inflación debería de haber motivado el ánimo de compra de los consumidores.
