Ciudad de México.– Andrés Manuel López Obrador se convertirá en el Presidente más poderoso en décadas a partir del 1 de diciembre. Los votantes le dieron el mandato democrático más grande en la historia de México. Controla al partido Morena, que junto con sus aliados tiene mayorías en ambas cámaras del Congreso. No tiene excusas para fallar, dice hoy la revista The Economist.

“Los luchadores y los soñadores de la izquierda política de México han esperado más de tres décadas al poder nacional. Con la inauguración el 1 de diciembre de Andrés Manuel López Obrador como Presidente de México termina la espera. El ex Alcalde de Ciudad de México, de 65 años de edad, prestará juramento ante una multitud que incluirá a dignatarios de 28 países”, detalla el artículo titulado “AMLO será el Presidente mexicano más poderoso en décadas”.

La revista británica recuerda que el 1 de diciembre será la segunda vez que AMLO se coloque la banda presidencial, la primera fue en 2006 cuando se negó a aceptar su derrota. “Esta vez la banda es la real. Los votantes dieron al gobierno el mandato democrático más grande en la historia de México. Ganó con el 53 por ciento de los votos, derrotando a su rival más cercano en 30 puntos porcentuales. Enfurecidos por la corrupción, la violencia y el letargo económico, aceptaron su argumento de que el sistema político necesita renovación, no ajustes tecnocráticos”.

Mientras que AMLO se prepara para lo que él llama la “cuarta transformación” de México, su poder y popularidad han aumentado, explica The Economist: “Controla a Morena, el partido que fundó en 2014. Junto con sus aliados, tiene mayorías en ambas cámaras del congreso. Los críticos se han callado. Envalentonado, ha abandonado la promesa de no cambiar la Constitución en la primera mitad de su mandato de seis años. Las encuestas sugieren que dos tercios de los mexicanos lo apoyan”.

El medio británico especializado en finanzas dice que en las últimas semanas AMLO se ha retirado del pragmatismo que a veces defendía en la campaña, que había tranquilizado a algunos mexicanos e inversionistas de clase media.

En cambio, agrega, “ha perseguido una agenda populista que ha impactado a los mercados aun cuando consolida su poder. En octubre, dijo que cancelaría un Aeropuerto Internacional de México que ya tiene un tercio construido. Esa decisión se produjo después de que el 1 por ciento de los votantes mexicanos participó en una consulta organizada por Morena para responder una pregunta que el propio AMLO escribió. Los aliados del Presidente electo en el nuevo congreso, que comenzó en septiembre, han presentado proyectos de ley que regulan la banca, la minería y las pensiones. El mercado bursátil ha perdido casi una quinta parte de su valor desde principios de octubre”.

The Economist recuerda que después del 26 de noviembre, cuando el mercado bursátil cayó un 4 por ciento, el gobierno de López Obrador calmó un poco a los inversionistas al promover a dos funcionarios respetados. Menciona también que con el presupuesto tiene la oportunidad de mandar otra buena señal a los mercados.

“El presupuesto, que se presentará al Congreso el 15 de diciembre, le dará al nuevo gobierno la oportunidad de demostrar que es serio sobre la estabilidad fiscal”, dice al medio Gabriel Lozano, del banco J.P. Morgan.

Sin embargo, explica The Economist, “muchos de los aliados de AMLO ven la estabilidad como la continuación de un status quo injusto. Ricardo Monreal, el líder de Morena en el Senado, dice que las ganancias de muchas empresas son demasiado altas y que se necesitan regulaciones”.

El nuevo Presidente es ciertamente enérgico, señala la revista y menciona algunas de sus propuestas:

“Ha aceptado una versión actualizada del Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte con Canadá y los Estados Unidos. Él ha presentado 50 ideas para frenar la corrupción y promover el ahorro en el sector público y está comenzando a implementarlas. Reducirá su propio salario en un 60 por ciento y recortará el salario de los funcionarios públicos superiores a ese nivel. Él ha presentado un plan de lucha contra el crimen que incluye la creación de una Guardia Nacional de 50 mil efectivos bajo el mando militar. Morena ha propuesto un proyecto de ley para legalizar la cannabis. AMLO tiene la intención de dar pasantías a jóvenes desempleados y pensiones más altas a los ancianos. Sus muchos proyectos incluyen un tren turístico a través del sur y una refinería en su estado natal de Tabasco”.

Para The Economist, AMLO está persiguiendo sus objetivos a través de una combinación poco convencional de deliberación del congreso y democracia directa. “El Congreso aprobó la ley que limita el pago de los burócratas. Pero AMLO planea poner la mayoría de las grandes decisiones, y muchas pequeñas, directamente a la gente. El tren turístico y la refinería se aprobaron en una votación del 24 al 25 de noviembre, que atrajo a la misma fracción minúscula del electorado que hizo la consulta del aeropuerto. Los votantes aprobaron otros ocho esquemas, incluida una propuesta en la boleta electoral para plantar árboles frutales y de madera en un millón de hectáreas, creando 400 mil empleos permanentes”.

El medio británico también menciona la tercera consulta que se llevará a cabo en marzo, donde dice que los votantes probablemente aprobarán la Guardia Nacional. “Los activistas de derechos humanos y la Suprema Corte no creen que el Ejército deba involucrarse en la labor policial. AMLO estuvo de acuerdo con ellos hasta hace poco. Planea dejar que la gente vote si se debe procesar a los ex presidentes por corrupción y a mitad de su mandato se les promete a los votantes la oportunidad de retirarlo de su cargo”.

Lo que parece una responsabilidad adicional es, de hecho, una forma de acumular poder, asegura The Economist, “los referendos marginan al Congreso”. Sin embargo, dice que AMLO sí está preparado para pasar por la legislatura, especialmente si teme el veredicto de la gente. “A mediados de diciembre se presentará un proyecto de ley para deshacer las reformas educativas, uno de los pocos logros populares del gobierno saliente. El Congreso aprobó una ley que permite a AMLO nombrar ‘superdelegados’ para supervisar los gastos de cada estado. Eso domesticará a los gobernadores que podrían oponerse a él”.

“México está a punto de tener un Presidente fuerte, como no ha habido en los últimos 30 años”, recuerda The Economist esa cita de Ricardo Monreal. Pero el medio agrega: “AMLO no tiene excusas para el fracaso”.