Nueva York.- El techo de cristal se resquebraja en la alta jerarquía económica global, un mundo que sigue dominado de forma aplastante por hombres pero donde algunas mujeres empiezan a tomar el mando. En seis meses, tres mujeres han sido designadas para dirigir los departamentos económicos de las tres instituciones multilaterales de referencia: Gita Gopinath acaba de ser nombrada en el Fondo Monetario Internacional (FMI); Pinelopi Koujianou ocupa el puesto en el Banco Mundial (BM), y Laurence Boone, en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Solo hay que pasarse por las reuniones anuales del Foro Económico Mundial en Davos o por el simposio de banqueros centrales en Jackson Hole para entender la relevancia de este triple nombramiento. Las discusiones que influyen en las políticas de los gobiernos están limitadas esencialmente a los hombres. Y esto sucede mientras el número de mujeres que estudia economía se estanca en las universidades de Estados Unidos, donde son una clara minoría entre los profesionales del ramo.
Janet Yellen hizo historia cuando fue nombrada en octubre de 2009 la primera mujer en dirigir la Reserva Federal de Estados Unidos, como también fue precursora Christine Lagarde al frente del Fondo Monetario Internacional, donde sigue siendo directora gerente. El Tesoro de EE UU nunca tuvo a una mujer al frente y están en una clara desventaja en los departamentos de las 20 grandes universidades estadounidenses, con una diferencia seis a uno frente a los hombres. Hasta la fecha, solo una mujer fue galardonada con el Nobel de Economía, Elinor Ostrom en 2009.
La primera economista jefe del FMI
El nombramiento este pasado lunes de Gita Gopinath causó tanta expectación. La economista de origen indio, de 46 años de edad, dejó impresionada al mismísimo Ben Bernanke, expresidente de la reserva Federal. Hace dos años decía en una entrevista que fue una de las mejores estudiantes que tuvo nunca. El gran experto de la Gran Depresión le hizo de guía en Princeton mientras preparaba el doctorado. Eso fue antes de ser nombrado para presidir la Reserva Federal.
La aún profesora de estudios económicos internacionales en Harvard tomará el relevo de Maurice Obsfeld. Ocupará el mismo cargo que ocupó otro de sus mentores, Kenneth Rogoff, que dirigió el departamento económico del FMI entre 2001 y 2003. Gita Gopinath ya saltó hace unos años a los titulares en EE UU cuando logró convertirse en la tercera mujer en ser designada profesora titular de economía en la prestigiosa institución académica en Boston. Antes fue asistente en la escuela de negocios de Chicago.
Su nombramiento, como el de Pinelopi Koujianou en el Banco Mundial, se produce en un momento especialmente sensible y su manera de pensar puede llevar el análisis del organismo en otra dirección al analizar los retos derivados de la globalización. La diversidad en si misma ya representa un reto a la norma establecida. Pero pese a que las estadísticas muestran una imagen contraria, la economista asegura no sentirse discriminada en la discusión macroeconómica.
Koujianou, de origen griego, de 55 años, fue designada economista jefe a final de abril. Era profesora de economía en Yale. Dedicó gran parte de su carrera a examinar a los países emergentes y en desarrollo. Su rigor y experiencia académica, por tanto, serán claves para definir desde la institución hermana del FMI políticas que preparen mejor a estas economías antes futuros choques y garantizar una mejor distribución de las oportunidades derivadas del crecimiento.
La trinidad del debate macroeconómico global la completa Laurence Boone, francesa de 49 años de edad. Ejerció como economista jefe para la aseguradora AXA y fue asesora del expresidente francés Francois Hollande. En su caso sustituye a otra mujer en el cargo de economista jefe de la OCDE, Catherine Mann. Las tres tendrán entre sus principales cometidos hacer un análisis de la coyuntura económica y proponer políticas en una momento en el que las instituciones multilaterales están amenazadas por el nacionalismo económico.
Tres departamentos clave
Los departamentos de análisis económico del FMI, el BM y la OCDE son de gran influencia. Las tres organizaciones están tratando, además, de evolucionar su forma de pensar y sus prácticas, para que su examen se ajuste más a la realidad. El comercio, la productividad, la deuda, los flujos de capital y los sistemas de cambio son parte de un complejo puzle global en el que la economía y las finanzas están entrelazadas. Son áreas que Gopinath estudió en profundidad.
El grupo de grandes economistas globales lo completa Kristalina Georgieva, de 65 años. La búlgara, que compitió con António Guterres por la secretaría general de las Naciones Unidas, fue nombrada hace un año directora general del Banco Mundial tras pasar por la Comisión Europea, donde estuvo a cargo de la gestión de presupuesto. También se puede incluir a la británica Clare Lombardelli, que a sus 39 años es economista jefe del Tesoro de Reino Unido.
Otra de las economistas que con su reflexión y disciplina está influyendo el debate global es Reinhart. La profesora de la Escuela de Gobernanza de la Universidad de Harvard trabajó como economista jefe del banco de inversión Bear Stearns y en el FMI. Está considerada como una de las pensadores más relevantes del momento. De su misma generación es Christina Romer, la segunda mujer que dirigió el consejo de asesores económicos de la Casa Blanca, con Barack Obama.