El Índice Nacional de Precios Productor (INPP) reflejó una variación de 3.77 por ciento anual durante julio, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Esto representó su nivel más alto desde abril de 2019, cuando el índice se ubicó en 4.83 por ciento anual.

Por actividad económica, los precios para los productores que laboran en alguna actividad primaria (agricultura, ganadería, pesca, entre otras) reportaron una variación negativa de 1.3 por ciento anual. Este indicador suma su tercer mes consecutivo con deflación.

Para los productores que se desempeñan en actividades secundarias (industrias), registró un aumento a 4.76 por ciento anual, su variación más alta desde abril de 2019, cuando se ubicó en 5.18 por ciento.

De manera particular, los productores que se desempeñan en las industrias manufactureras reportaron un incremento de precios de 6.23 por ciento.

Además, los costos en la construcción y las ‘utilidades’ (agua, electricidad y gas) subieron en 1.87 y 1.3 por ciento, respectivamente, mientras que los de la minería descendieron 2.73 por ciento a tasa anual.

Por otra parte, las actividades terciarias (servicios), principal motor de la economía nacional, mostraron una variación de 2.78 por ciento, su menor alza en lo que va del presente año.

En la variación mensual, los precios al productor presentaron una variación negativa de 1.2 por ciento, la más alta desde abril, cuando subió 1.45 por ciento.

Entre los productos que más aumentaron sus precios y que más le ‘pegaron’ a los bolsillos de los productores se encontraron: lingote y plancha de acero (17.81 por ciento); el petróleo crudo (15.87 por ciento); plata (15.39 por ciento); cobre (12.41 por ciento) y otros petrolíferos (9.41 por ciento).

Estos incrementos se compensaron con la reducción de otro tipo de productos como uva (14.94 por ciento); tomate verde (14.66 por ciento); amoniaco (11.64 por ciento); otros metales ferrosos (8.56 por ciento) y chiles frescos (6.26 por ciento).