El exministro británico de Deportes encargado de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, Hugh Robertson, subrayó que la ceremonia de apertura “dará el tono” del desarrollo de la competición.
“Es un evento enorme que sin duda da el tono de los 17 días siguientes. Una ceremonia de apertura exitosa permite comenzar los Juegos de la mejor manera y concentrarse enseguida en los atletas”, estimó Robertson.
Río Sena
El antiguo ministro, que asistirá a los Juegos de París por última vez como presidente del Comité Olímpico Británico, celebra la idea de organizar la apertura en el río Sena, calificándola de “innovadora y destacable”.
Será la primera vez que la inauguración de los Juegos se celebre fuera de un estadio: París tendrá un desfile fluvial el 26 de julio con las delegaciones de los países recorriendo el río a su paso por la ciudad en barco.
En 2012 la ceremonia de los Juegos de Londres dejó una gran impresión, con un momento estelar: Un número que situaba a la reina Isabel II llegando al estadio tras saltar en paracaídas junto con James Bond.
La mayor preocupación de Robertson entonces fue la seguridad: “Era y será siempre la gran preocupación”, señaló el antiguo militar de 61 años, que sirvió en el ejército entre 1982 y 1995, incluyendo la primera Guerra del Golfo.
“Fue hace diez años y recuerdo que tenía una mezcla de confianza en nuestros planes y ansiedad por los imprevistos”, subrayó.
A pesar de las incertidumbres surgidas por las recientes elecciones legislativas, Robertson cree que los Juegos de París serán “excepcionales”.
“Creo que abordamos estos Juegos con menos problemas que en las ediciones precedentes”, concluyó.