El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, inspecciona los daños en el Palacio de Planalto después de que fue asaltado por partidarios del expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, en Brasilia. ERALDO PERES (AP)

El presidente de Brasil, Lula da Silva, decretó a última hora de este domingo la intervención federal en Brasilia, lo que supone tomar el control de la seguridad de la capital, tras el asalto de miles de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro a las sedes de la Presidencia, el Congreso y el Tribunal Supremo del país, en Brasilia. La policía retomó el control de los tres edificios sobre las 17.00 (hora local). Lula responsabilizó a su predecesor del ataque tras llegar a la capital desde el Estado de Sao Paulo e inspeccionar los daños en el palacio presidencial. Hay cientos de detenidos. Este lunes, se han sucedido las condenas de diversos líderes internacionales, como los jefes de Gobierno de Alemania o el Reino Unido. También el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha condenado el asalto. Además, Sánchez ha alertado de que los movimientos ultras suponen “la mayor amenaza sobre la democracia, la paz y la prosperidad en el mundo”, ya que están dispuestos a “arrollar con todo”.

1.200 detenidos en el desalojo del campamento bolsonarista frente al cuartel general del ejército en Brasilia
Los agentes de la policía militar del Distrito Federal (Brasilia) y de la Fuerza Nacional de Seguridad de Brasil han desalojado prácticamente en su totalidad el campamento de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro montado frente al cuartel general del ejército poco después de las elecciones presidenciales, ganadas por Lula da Silva. Según informa el diario brasileño O Globo, “en total, 1.200 personas han sido detenidas” en el campamento y en estos momentos son ya escasos los acampados que permanecen en el recinto y están recogiendo sus enseres para marcharse.

Nuestro compañero Joan Royo Gual se encuentra en el lugar. A unos 500 metros del lugar la policía bloquea el ingreso al sitio donde hasta esta mañana estuvo el campamento. Resta ahora levantar los restos de la acampada. Hay gran cantidad de policías en las avenidas que conducen al cuartel general del Ejército.

Tras el asalto el domingo de simpatizantes del expresidente ultraderechista a las sedes de la presidencia de Brasil (Poder Ejecutivo), el Congreso (Legislativo) y el Tribunal Supremo (Judicial), el magistrado del Supremo Alexandre Moreas ordenó desmantelar este campamento, y otros montados frente a otros cuarteles en otras ciudades de Brasil, en menos de 24 horas, así como la detención de los acampados.

Rusia y China condenan el ataque a la democracia en Brasil y expresan su respaldo de China
Los gobiernos de Rusia y China han expresado este lunes su condena por el asalto a las sedes de los poderes democráticos en Brasil por seguidores del expresidente Jair Bolsonaro. El Kremlin ha condenado “rotundamente” las acciones de “los instigadores de los desórdenes en Brasil”, mientras que Pekín ha manifestado su apoyo a “las medidas tomadas” por el Gobierno brasileño de Lula da Silva para “restaurar el orden y la estabilidad” tras el asalto.

“Moscú condena rotundamente las acciones de los instigadores de los desórdenes en Brasil”, dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, agregando que el Kremlin apoya “las acciones para restaurar el orden y la legalidad” en el país latinoamericano. “Apoyamos totalmente al presidente brasileño Lula da Silva”, señaló.

Por su parte, el portavoz del ministerio chino de Exteriores, Wang Wenbin, ha expresado el apoyo de su país a “las medidas tomadas” por el Gobierno brasileño para “restaurar el orden y la estabilidad”. “Creemos que bajo el liderazgo del presidente Lula, Brasil mantendrá la estabilidad nacional y la armonía social”, ha dicho Wang.

La policía rodea el campamento de los bolsonaristas frente al cuartel general del ejército en Brasilia
La policía se está concentrando junto al campamento que los seguidores del expresidente Jair Bolsonaro mantienen ante el cuartel general del Ejército brasileño en Brasilia desde poco después de las elecciones presidenciales de octubre que dieron el triunfo a Lula da Silva. A última hora del domingo, el magistrado del Tribunal Supremo, Alexandre de Moraes, ordenó el desmantelamiento de estos campamentos en 24 horas y la detención de los acampados.

Cientos de policías se han congregado en torno al campamento mientras que los soldados que vigilaban el área se han retirado, según han informado testigos presentes en la zona a la agencia Reuters. La acampada, al igual que las otras distribuidas en otros puntos del país, tenía como objetivo presionar al ejército para que interviniese y restaurase a Bolsonaro en el poder, pese a la derrota sufrida por el expresidente en las elecciones presidenciales de octubre. Si bien los uniformados no se han prestado al golpe de Estado, sí han permitido que las acampadas se mantuviesen frente a sus puertas durante semanas.

Mientras los policías se apostaban en torno al campamento, muchos de los acampados han comenzado a recoger sus cosas y a marcharse, por miedo a ser detenidos. Anoche, el magistrado Moraes advirtió de que las fuerzas del orden detendrían a todos los bolsonaristas acampados. Adviertió de que revisarían cámaras de seguridad, reservas de hoteles y las contrataciones de los autobuses que llevaron a Brasilia a cientos de manifestantes para identificar a todos los participantes.

En la imagen, de Amanda Perobelli para Reuters, dos bolsonaristas empaquetan sus pertenencias para abandonar el campamento frente al cuartel general del ejército en Brasilia ante dos policías.

Orden de desalojo para los campamentos bolsonaristas frente a los cuarteles
Tras el asalto este domingo contra las sedes de las principales instituciones democráticas de Brasil por miles de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro, desactivado por la policía, el magistrado del Tribunal Supremo Federal, Alexandre de Moraes, ha ordenado el desmantelamiento de los campamentos de bolsonaristas frente a cuarteles militares en varias ciudades, empezando por el del cuartel general del Ejército en Brasilia.

Algunos acampados temían que se ordenase el desmantelamiento de ese campamento, según ha comprobado Joan Royo, enviado especial de EL PAÍS a Brasilia. Y, según algunos medios brasileños, como la cadena de televisión CNN, con razón. Según informa la cadena estadouniense, el ministro [presidente] del Supremo Tribunal Federal (STF), Alexandre de Moraes, ha decidido el desalojo de todos los campamentos bolsonaristas en un plazo de 24 horas, así como la detención de los acampados. El desmantelamiento será llevado a cabo por la policía militar de cada estado con el apoyo de la Fuerza Nacional y la policía Federal si es necesario. Sin embargo, la cuenta en Twitter del STF no informa de ninguna decisión al respecto.

Según el diario brasileño O Globo, “el ejército y la policía militar del distrito federal (Brasilia) van a iniciar este mismo lunes la retirada de los manifestantes que aún están acampados frente al cuartel general en Brasilia”. O Globo da cuenta de una reunión a última hora de la noche del domingo en la que participaron los ministros de Defensa, José Múcio; Justicia, Flávio Dino y Casa Civil, Rui Costa, junto con el comandante del Ejército, Júlio César Arruda y en la que, supuestamente, se discutieron “los detalles de la operación” de desalojo, que se llevará a cabo este lunes.

Sánchez: “Los movimientos ultra son la mayor amenaza sobre la democracia, la paz y la prosperidad”
Los El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha referido este lunes al asalto a las sedes de los poderes democráticos de Brasil perpetrado este domingo por seguidores del expresidente Jair Bolsonaro. Sánchez ha alertado de que los movimientos ultras suponen “la mayor amenaza sobre la democracia, la paz y la prosperidad en el mundo”, ya que están dispuestos a “arrollar con todo”.

En una intervención en la inauguración de la VII Conferencia de Embajadores, Sánchez ha recordado el asalto al Capitolio estadounidense por seguidores del expresidente Donald Trump y ha destacado que “los métodos se repiten milimétricamente”, enumerando la secuencia de actos de los movimientos ultraderechistas: “uso sistemático de la mentira” para ganar seguidores, el insulto, la violencia verbal para envenenar la convivencia y finalmente “un ataque a las instituciones democráticas”.

También ha manifestado el apoyo de su Gobierno al presidente Lula y a las instituciones “libre y democráticamente elegidas por el pueblo brasileño”.

Condena sin paliativos de Londres y Berlín al asalto contra la democracia en Brasil
Los jefes de Gobierno de Alemania y el Reino Unido han condenado este lunes sin paliativos el intento de golpe de Estado perpetrado el domingo en Brasilia por cientos de partidarios del expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro, que asaltaron las sedes de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Tanto el canciller alemán, Olaf Scholz, como el primer ministro británico, Rishi Sunak, han expresado su apoyo sin matices al presidente legítimo, Luiz Inácio Lula da Silva.

“El presidente Lula y su gobierno tiene el apoyo total del Reino Unido”, ha afirmado Sunak en un mensaje en su cuenta de Twitter, en el que, además, condena “cualquier intento de socavar el pacífico traspaso de poderes y la voluntad democrática del pueblo brasileño”.

Por su parte, el canciller alemán ha condenado, también en Twitter, los “terribles” actos del domingo, afirmando que los “ataques violentos a las instituciones democráticas son un ataque a la democracia que no se puede tolerar”. “Estamos hombro con hombro con el presidente Lula y con el pueblo brasileño, dice Scholz.

Albares llama a la “reflexión” ante los actos antidemocráticos de la ultraderecha
El ministro español de Exteriores, José Manuel Alberes, ha condenado este lunes el asalto a las sedes de los tres poderes del Estado en Brasil y ha llamado a llevar a cabo una “reflexión” ante las actuaciones de la extrema derecha de cuestionar los resultados electorales. El ministro ha destacado la “inmensa ola de solidaridad” con Brasil que ha surgido en América Latina y en todo el mundo tras los actos del domingo, pero también ha puesto de relieve la necesidad de “confrontar las mentiras” que expanden los grupos de extrema derecha.

Preguntado en una entrevista en la Cadena SER cómo combatir esa cadena de la ultraderecha que empieza con la difusión de noticias falsas y el cuestionamiento de los resultados electorales y termina en actos como los vividos en el Capitolio hace dos años o en Brasilia, Albares ha reconocido que “nadie tiene la fórmula mágica”, pero que es necesario “confrontar la mentira, situar los hechos y desvelar a los que de manera insidiosa intentan sembrar dudas sobre resultados electorales o, lo que es peor, a los que, aceptando los resultados, dicen que hay dirigentes legítimos e ilegítimos”. “Ese es el poso de la ultraderecha”, ha concluido, alertando de que acontecimientos como el del domingo “hacen presagiar estos movimientos no desaparecerán con facilidad”.

Esa tendencia de la ultraderecha a cuestionar los resultados “se extiende y debe llevar a la reflexión”, ha dicho el ministro, asegurando que el Gobierno de España “defenderá la democracia en Brasil y en todo el mundo” y “no escatimará esfuerzos” en ese sentido. “España necesita un Brasil democrático, de vuelta en la escena internacional, en un año en el que tenemos la presidencia del Consejo Europeo [en la segunda mitad del año].Finalmente, preguntado por la reacción de la portavoz nacional del Partido Popular, Cuca Gamarra, criticando eliminación del delito de sedición, Albares ha dicho que, en calidad de ministro, le preocupó mucho “que el primer partido de la oposición en España, en su primera reacción, no diga nada en apoyo a la democracia o en rechazo de la ultraderecha en Brasil”. “Eso demuestra que el PP no tiene nada que decir en política internacional”, ha dicho. “Como ciudadano”, ha afirmado, “es lamentable que se intente cuestionar la legitimidad de un presidente”.

La acampada bolsonarista frente al cuartel general del ejército, en calma
La acampada que partidarios de Bolsonaro plantaron frente al cuartel general del ejército en Brasilia pocos días después de las elecciones en las que resultó elegido Lula da Silva se mantuvo en calma durante el asalto de los bolsonaristas al Congreso y al Tribunal Supremo, frustrada por la policía. Eso sí, muchos temen que, tras los acontecimientos de la víspera, el campamento sea desmantelado.

La Plaza de los Tres Poderes de Brasilia, sitiada
Nuestro colega Joan Royo acaba de llegar a Brasilia. Nos envía estas imágenes desde la Plaza de los Tres Poderes, el epicentro de las insituciones democráticas de la capital brasileña que este domingo ha sido escenario del asalto por parte de seguidores de Bolsonaro. Ahora, a primera hora de la madrugada del lunes, está completamente sitiada por la policía.

“Democracia siempre. Buenas noches”: Así despide Lula una jornada dramática en Brasilia
El presidente Lula publicó una foto a última hora de la noche del domingo de un encuentro con la presidenta y los ministros del Tribunal Supremo durante la visita que hizo horas antes para revisar los daños perpetrados por los seguidores de Bolsonaro en las instalaciones de esa institución y en el Palacio de Planalto.

“Los golpistas que han promovido la destrucción del patrimonio público en Brasilia están siendo identificados y serán castigados. Mañana retomaremos los trabajos en el Palacio de Planalto. Democracia siempre. Buenas noches”, ha escrito el presidente en su cuenta de Twitter.

Además de reunirse con los presidentes de los otros poderes (el Congreso, el Senado y el Tribunal Supremo) para tratar el asalto a las instituciones en Brasilia, Lula tiene previsto reunirse con gobernadores y conversar telefónicamente con el primer ministro de Portugal, António Costa, y con el expresidente de Estados Unidos Bill Clinton, según su agenda.

El Ejército y la policía prevén desmantelar el campamento de bolsonaristas de Brasilia
El Ejército y la Policía Militar del Distrito Federal van a comenzar a retirar a los manifestantes que seguían en el campamento delante del Cuartel general del Ejército en Brasilia, donde los seguidores de Bolsonaro se concentraron en los días previos al asalto a la sede de las instituciones democráticas, informa O Globo.

Según ese medio, la operación que se desarrollará este lunes, fue acordada este domingo en una reunión en Planalto entre los ministros de Defensa, Justicia, Casa Civil y el jefe del Ejército. Tras el asalto a las sedes del Congreso, el Gobierno y el Poder Judicial, algunos seguidores de Bolsonaro que habían participado en él trataron de regresar al campamento, pero la policía se lo impidió. Sin embargo, en el lugar sigue habiendo seguidores del expresidente.

Los jefes de los tres poderes se reunirán la mañana de este lunes en Brasilia
Los jefes de los tres poderes del Estado brasileño: el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, los jefes de la Cámara de Diputados, Arthur Lira y del Senado, Rodrigo Pacheco, y la presidenta del Tribunal Supremo, Rosa Weber, se reunirán en la mañana del lunes a las 9:00 de Brasilia para analizar la situación tras los ataques de partidarios bolsonaristas a las instituciones que lideran, según informa la corresponsal de EL PAÍS en Brasil, Naiara Galarraga.

Por otra parte, la Policía Federal ha anunciado que refuerza la seguridad del presidente Lula después del asalto a las instituciones democráticas.

El número de detenidos por el asalto asciende a 260
Al menos 260 personas han sido detenidas por participar en el asalto al Congreso, el Palacio de Planalto y el Tribunal Supremo en Brasilia, según la última cifra ofrecida por la Policía Civil. Todos ellos han sido trasladados a sus instalaciones donde se les ha identificado y tomado declaración, informa el diario O Globo.

Por otra parte, la web de ese medio ha informado de que algunos bolsonaristas radicales han regresado al campamento frente al Cuartel general del Ejército donde estuvieron concentrados antes de la toma de las instituciones.

Lula llega a Brasilia e inspecciona los daños del Palacio de Planalto
El presidente Lula ha llegado en la noche de este domingo a Brasilia desde el Estado de Sao Paulo, donde visitaba una localidad afectada por las lluvias, y ha inspeccionado los daños causados por los asaltantes durante la invasión de la sede de la presidencia, el Palacio de Planalto.

O Globo ha difundido unas imágenes de Lula revisando los daños en el palacio presidencial. Según la narración del canal de televisión, que se refiere a los asaltantes como un “movimiento terrorista”, el mandatario recorrió todos los pisos del edificio. Además, visitó también las instalaciones del Supremo Tribunal Federal para ver los destrozos.

Tras conocerse el asalto a las instituciones democráticas en Brasil por parte de los seguidores de Bolsonaro, Lula anunció la intervención federal de Brasilia y responsabilizó a su predecesor por los acontecimientos. “Aprovecharon el silencio del domingo, cuando todavía estamos formando el Gobierno, para hacer lo que hicieron. Y saben que hay varios discursos del expresidente alentando eso. Y esa es también su responsabilidad y la de los partidos que lo apoyaron”, escribió en su cuenta de Twitter.

Bolsonaro, desde Estados Unidos: “Las invasiones de edificios escapan a la regla”
La primera reacción del expresidente Bolsonaro ha llegado más de dos horas después de que la policía pusiera fin al asalto mediante varios tuits: “Las manifestaciones pacíficas, conforme a la ley, son parte de la democracia. Sin embargo, las depredaciones e invasiones de edificios públicos como las ocurridas hoy, así como las practicadas por la izquierda en 2013 y 2017, escapan a la regla”, ha afirmado el ultraderechista, que se refiere a las protestas populares en la recta final del Gobierno de Dilma Rousseff y tras su destitución, cuando manifestantes se pasearon por el tejado del Congreso, informa Naiara Galarraga Gortázar.

Bolsonaro añade que durante su mandato respetó la ley y repudia lo que describe como “acusaciones, sin pruebas” contra él “por parte del actual jefe del Ejecutivo de Brasil”. Es la primera ocasión en la que reconoce el relevo y que Lula es el actual presidente.

Reportan 46 heridos
Hasta las 21.00 de este domingo, el Hospital de Brasilia había recibido 46 heridos en el intento de asalto al Congreso y el Palacio de Planalto. De este total, 40 tenían heridas menores y seis estaban graves. Dos personas necesitaron ser operadas de inmediato. Las autoridades del hospital no dieron detalles de las heridas sufridas por los manifestantes.

Habla el ministro de Justicia, Flávio Dino: “Van a ser indentificados uno a uno”
El ministro de Justicia de Brasil advierte que los detenidos por el ataque a las sedes de los tres poderes del Estado en Brasilia sera indentificados “uno a uno”. “Esto que ha ocurrido no tiene precedentes en la historia del país”, dijo.

Alexandre Padilha, ministro de Relaciones Institucionales: “La intención era movilizar un golpe de Estado”
El ministro de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, advirtió que irán detrás de aquellos que decidieron financiar el ataque el Planalto y al Congreso. “La intención era movilizar un golpe de Estado” contra la democrcia brasileña, dijo el ministro.

La atención del Gobierno estará puesta ahora en identificar a los instigadores y financiadores de los “actos terroristas” registrados en Brasilia, dijo Padilha.

Habla el ministro de Justicia, Flávio Dino: “Esto es terrorismo, es golpismo”
Hemos vivido una tentativa grave contra nuestra democracia”, dice Dino, y recuerda que las penas que enfrentan los manifestatentes es de hasta 12 años de cárcel.

Dino considera único en la historia de la democracia brasileña lo sucedido este domingo, y carga contra el gobierno de Brasilia por no anticipar los ataques. El ministro dice que la policía del distrito federal tenía la visión de que la gente que se acercaba hacia la Explanada de los Ministerios sería “fácilmente controlada”. Dino exige al gobernador que castigue a los policías que no cumplieron con su deber en el control de orden público.

Lula da Silva decretó la intervención federal de Brasilia, lo que supone retirtarle el control de la seguridad. “La policia federal es solo un complemento”, recuerda el ministro Dino. “Propusimos al presidente de la República decretar la intervención federal, porque obviamente había una anomalía” en la seguridad, dice el ministro.

“Hemos recuperado las sedes de los tres poderes de la República, con daños gravísimos. Tenemos aproximadamente 200 detenidos en flagrancia” por los ataques a las sedes del Congreso, el Poder Ejecutivo y la Corte. “Detuvimos además unos 40 ómnibus que participaron en el transporte [de los manifestantes] Y vamos a encontrar a los financiadores”, agrega Dino.

“No lograrán destruir la democracia brasileña”, advierte el ministro de Justicia de Brasil, quien considera que lo sucedido este domingo “no es una continuidad del proceso electoral. Esto es terrorismo, es golpismo”.

Joe Biden condena “el asalto a la democracia” brasileña
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se refirió al intento de golpe de Estado en Brasil. durante un alto en su gira por México.

“Condeno el asalto a la democracia y a la transferencia pacífica del poder en Brasil. Las instituciones democráticas de Brasil cuentan con todo nuestro apoyo y la voluntad del pueblo brasileño no debe ser socavada. Espero seguir trabajando con @LulaOficial”, escribió Biden en su cuenta oficial en Twitter.

En diciembre pasado, Biden invitó a Lula a visitarlo en Washington. El encuentro fue confirmado, pero aún no tiene fecha.