El presidente del CCE, Carlos Salazar Lomelín, previo a una conferencia en enero pasado. Foto archivo: Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO.- México se encuentra a un paso de “la tormenta perfecta” en materia económica, luego del “Lunes Negro” alertó el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Salazar Lomelín, quien llamó al Gobierno federal a tomar medidas a corto y largo plazo, para hacer frente a una afectación más profunda en las finanzas del país.

Aseveró que “no hay duda de que esto no se puede golpear enormemente; los números, dependiendo de los supuestos, pueden ir desde el 0.6 por ciento al 1.5 por ciento del Producto Interno Bruto”, lo que significaría menos ingresos para el Estado.

Lo que sí es claro, insistió en entrevista con Pascal Beltrán del Río, para Imagen Radio, es que “sí hay un impacto en las finanzas del Estado, si esto no se regulariza rápidamente”.

“Se nos está juntando otra vez la tormenta perfecta, y espero que esto haga que pensemos muy bien las decisiones que vamos a tomar internamente”, indicó.

Salazar Lomelín pormenorizó que con la caída de 37.1 por ciento, de la mezcla mexicana de petróleo, que cerró el lunes 9 en 24.43 dólares por barril, su precio más bajo desde el 15 de febrero de 2016, el gobierno “recibirá menos ingresos por petróleo, y el hecho de que la economía no crezca, le deja menores ingresos tributarios al Estado”.

En la jornada del lunes, y en línea con los mercados internacionales, el Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores cayó 6.4 por ciento, su mayor caída desde octubre de 2008, mientras que el peso mexicano se depreció más de 5 por ciento respecto al cierre del viernes pasado. El dólar quedó en 21 pesos con 17 centavos a la venta en ventanillas.

Esta combinación, agregó el presidente del organismo cúpula, “hará necesario regular a corto plazo la situación de las finanzas públicas, para lograr el objetivo de mantenerlas estables”.

De ahí la necesidad de implementar medidas como reducir el gasto público y acelerar la puesta en marcha, ya, del Plan de Infraestructura; “la única forma que realmente reactivará nuestra situación económica”.

Dijo que este plan se ha retrasado “en gran medida, por una situación ideológica”.

Se sigue pensando que sectores tan importantes como el energético, deberían ser mantenidos y promovidos cien por ciento por el Estado. Pero ha sido demostrado reiteradamente, que no es la mejor solución”.

Con todo ello, Salazar Lomelín dijo que “el panorama no luce nada alentador”, al tiempo que advirtió que en este momento el poner en marcha una Reforma Fiscal, como sugieren especialistas, “sería una tragedia”.

“No habría ninguna estructura que la sostenga” concluyó.