En medio del colapso de las acciones y los productos básicos, el café arábigo, la materia prima más volátil este año, registró un repunte ante la escasez de granos de alta calidad preferidos por Starbucks.

Los granos arábigos para entrega en mayo subieron 1.7 por ciento a mil 92 dólares la libra en el ICE Futures en Nueva York. El precio llegó a subir hasta 3.3 por ciento. En las tres sesiones anteriores, el producto cayó 12 por ciento, la mayor caída desde octubre de 2008.

“Con la situación de oferta muy limitada para los arábigos suaves en América Central, el café no debería caer”, señaló en entrevista telefónica el director de café del grupo estadounidense Comexim, Rodrigo Costa. Incluso en Brasil, el principal productor y exportador del mundo, “no hay disponibilidad”, dijo.

A medida que los precios aumentaron en el trimestre anterior, Brasil casi se “agotó” la cosecha 2019-2020 que fue menor a la esperada, dijo Costa.

Los diferenciales para los granos colombianos y centroamericanos permanecen elevados en el mercado al contado, y el alivio no llegará hasta el tercer trimestre con la nueva cosecha de Brasil.

“Si los mercados se calman”, existe la posibilidad de que el grano arábiga pueda llegar hasta 1.50 dólares la libra, agregó el experto.

“En Brasil, lo que afecta los diferenciales es la falta de café”, dijo Renata Eller Santos de Eller Coffee Trading en Varginha, Brasil, en una entrevista en la convención de la National Coffee Association en Austin, Texas. “La cosecha del año pasado no solo fue más pequeña sino además de menor calidad”.

Si bien la nación está preparada para recoger una cosecha excelente en 2020, “todo dependerá de la calidad”, dijo. “A los productores les está yendo bien. Los que guardaron y aún tienen café lo acumularán por más tiempo, por lo que se mantendrá ajustado hasta el comienzo de la nueva cosecha”.